sábado, 25 de abril de 2009

Biketrekking de sábado : nueva fórmula

Hoy practiqué una variante a mi habitual krrtrekking, lo hice en bicicleta. Si bien deambulo en cleta muchas veces después de subir el cerro San Cristóbal, en esta ocasión fue un trance deliberado.

Llegar al mirador de la cumbre del cerro, beber un rico mote con huesillos y descansar un poco, fue el preámbulo de espera para que llegara mi partner (supuestamente iba a llegar a esa hora). Como me resulta difícil esperar mucho rato, le avisé telefónicamente que me iba a pasear hacia La Pirámide (ahora que está abierto el paso, tras la construcción del famoso tunel que se perforó en nuestro lindo cerro). Tras recorrer toda la ruta, insistí en llamar sin resultados, así es que decidí volver a subir a la cumbre (hay mala señal para celulares). A medio camino, me encontré con una pareja de amigos que se inicia en los paseos por el cerro. Iban con Cata (una chiquitita de 4 meses) metida en una mochila. Los acompañé hasta dejarlos instalados en el mirador de la cumbre, momento en que supe que mi partner se había ido a su casa. Buena la coordinación!!!!

Acordamos un nuevo punto de reunión y bajé raudo hacia el barrio Bellavista y curiosamente llegamos juntos al Ocean Pacific. El trámite fue un fracaso, no nos podían arrendar el lugar que queríamos para las bodas de oro de los viejos. MMMhhh!!!. Plan B en ejecución.

Nos fuimos ruteando por las calles del barrio Bellavista, pasamos al barrio Recoleta y el hambre me llevó a una picada que conozco hace más de 20 años, El Toro, en calle Loreto. Un lugar propicio para disfrutar un aperitivo. Pedimos un ceviche de salmón (especialidad de la casa) y unos pisco sours. Un plato con piso de lechugas, unos cortes de alcachofas, alcaparras, los trocitos de salmón y palta. Exquisito!!!. Una armonía cítrica acompañada de una maravillosa selección de música lounge.

Tras el aperitivo, nuevo destino, el barrio Brasil. Un vertiginoso paso por el Parque Forestal, luego por el medio del centro de Santiasco, saludamos al paso al siempre filete Majestic y seguimos hacia el Ocean Pacific, en calle Cumming.

Trámite exitoso y unos minutos después, ibamos rumbo al barrio Santa Isabel. Ahí logramos conectar con la ciclovía (la gran deuda del país con sus ciclistas) y admirar la vieja arquitectura del sector y esos entrañables lugares como la feria de libros que hay en la intersección con calle San Diego.

Por fin, llegamos al barrio de Avenida Italia, en busca de unos nuevos sitios que se han instalado. La sorpresa de esa hora, casi todos cerrados (bueno, era un poco tarde).

Se ejecuta de inmediato plan C. Llegamos en cleta hasta el Olivié, un restorán ruso que me encanta y que siempre está abierto cuando se le necesita.

Partimos con agua mineral como de costumbre y tras una insidiosa mirada a la carta, salió la selección perfecta de platos. Beef Stroganoff (carne de res cortada en juliana con champiñones, salsa de tomate, crema, vino blanco y arroz) para mi compañero y para mi hambre atroz una Buzenina (carne de cerdo en láminas, literalmente para cortar con el tenedor, cocida en finas hierbas, con trozos de repollo y salsa de ciruelas) maravillosa!!.

A la selección le pusimos un vino syrah reserva de Casa Silva año 2005 delgado y potente, que nos dio un delicioso placer en la combinación. Realmente, muy rico!!!

Para los postres elegimos una torta Olivié (un bizcocho ruso con crema de leche al limón y chocolate) y una pequeña grosería un Blichiki (crepes rellenos con ricota y salsa de cítrico y menta).

Gran biketrekking, tendrá que repetirse!!

Comiendo rápido en Santiasco

En el eterno afán de moler carne humana, Santiasco a veces no nos deja mucho tiempo para disfrutar un almuerzo y alcanzar a conversar. Solo 40 minutos disponibles, los pasos ansiosos nos llevan al Dominó, un sitio de sandwiches deliciosos (inolvidable el italia tomate abajo o una dinámica tomate abajo, exquisitos). Sin embargo, esa misma vorágine que nos consume a todos, hace sucumbir la calidad de atención de este sitio y tras unos minutos de espera, decidimos migrar a algún lugar en que el tiempo se valorase mucho más. Que mejor, nos fuimos al Rápido. Este sitio tiene su promesa de valor en el nombre, no alcanzamos a caminar un paso desde la entrada y ya nos vimos forzados a elegir, "una y una?", "cuántas quiere?". Oh!!, es vertiginoso. Nos deleitamos con unas empanadas de Barros Luco (carne y queso, fantásticas). Hay empanadas clásicas de queso, de pino, de mariscos, de camarón queso, en fin, mucha variedad.

La conversación fluyó rápida y amena y otra ronda de empanadas vino a saciar el gusto a poco que nos quedó. la verdad tuvimos una tercera ronda para poder finalmente salir del Rápido satisfechos. Excelente!!!!

Con algunos minutos de ventaja, decidimos visitar la sala de arte del edificio de Codelco. Ahí nos esperaba una exposición con obras de arte de 8 artistas chilenos notables. Bárbara de la Jara, Claudia Urzúa, Fernando de Calisto, Jaime Torres, Esteban Morales, Marcelo Guerra, María Isabel Badía y Cristián Castillo.

Esculturas de aluminio y bronce, pinturas al óleo, acuarelas, pasteles, acrílicos y quizás cuantas otras técnicas. Fascinantes las esculturas de cuerpos sensuales y de curiosas extremidades mutiladas de Bárbara, la expresividad de las formas que propone Fernando de Calisto, la pintura emocional de Esteban Morales y las deliciosas pinturas de figuras femeninas de Marcelo Guerra. Un arte diverso y nutritivo.

40 minutos bien invertidos, volvemos al trabajo.

miércoles, 22 de abril de 2009

Celebración del Día de la Tierra en Caruso ¿porqué no?

Cada 22 de abril se celebra lo menos cuidado por el ser humano, nuestro planeta. Realmente, ¿cómo se puede celebrar sin darnos cuenta de la sistemática destrucción que hacemos de todo?. Eso incluye nuestras propias vidas, agotadas en el ejercicio del ego desatado en la creencia de la superioridad del más débil de los seres vivos que existe en el planeta: nosotros, los seres humanos.

En fin, a mi me gusta disfrutar cada día que vivo en este lugar y hoy decidí hacer una celebración privada por todos, los conscientes y los que no. Que importa.

Tras una jornada laboral intensa, mis pasos tenía destino, el restorán Caruso del Hotel Crowne Plaza. Un inmenso hotel, elegante y ubicado en ese curioso límite de Santiasco, llamado Plaza Italia, en donde se celebran los mayores éxitos que identifica el pueblo chileno (confluyen allí masas desde todas partes cada vez que hay que celebrar) también es ese lugar que una parte de los habitantes de Santiasco considera el umbral o pórtico de la pobreza (jamás bajan de ahí, salvo como anécdota). La frontera entre lo lindo y lo que no, entre lo pobre y lo otro. La muralla china del asqueroso credo clasista chileno.

Me instalé en este bonito lugar para pedir, antes que todo, una botella de agua mineral sin gas, indispensable a la hora de preparar la degustación de una buena cena. Mientras revisaba la carta, me traen una fina canasta de panes y un recipiente con mantequilla y aceite de olivas. Gran detalle!. Pan especiado, otra variedad que en textura y color parece un queque, una delicada sopaipilla, en fin una muestra variopinta de bocados de masas para entretener el paladar.

La carta contiene una variedad austera pero sabrosa de platos que incluye entradas frías y ensaladas calientes y sopas, carnes (res, cordero y ciervo), frutos del mar (atún, lenguado y mariscos) y los términos de postres (nacional, internacional y lo que queda). Una carta pequeña pero claramente contundente.

Elijo un plato prometedor, un civet de ciervo marinado al cabernet sauvignon, chucrut morado y una porción de enebrina y vegetales con spatzle. Traducido en términos prácticos, se trata de un vistoso plato con cortes finos de carne de ciervo delicadamente marinado en un buen cabernet sauvignon, acompañado de una porción deliciosa de chucrut de repollo morado y un pote con unas masitas pequeñas mezcladas de verduras salteadas en olivas, que arman un plato formidable!!. Sin considerar el efecto estético de unas hojas de lechuga costeña, la verdad es que el plato se veía magnífico, olía de lo mejor y en la boca fue un placer de dioses. Extraordinario!!.

Acompañe con algo maravilloso, una botella del Syrah Reserva Corralillo de Matetic año 2007 (Valle de San Antonio), definitivamente imperdible. Una armonía total y un placer que todavía resuena en mi paladar. Lo mejor de todo, es que como la carta de vinos del Caruso está en extinción (la cambian en estos días, según me informan), tuve que elegir de la oferta del Festival de Vinos Reserva 2009 (por favor aprovechenla), un ofertón que implica que tengo ante mí una segunda botella gratis de ese manjar de vino, que espero disfrutar cuando cocine algo apropiado.

Tras el placer de mi celebración, me sentí forzado a disfrutar un filete de postre y no tuve que pensar mucho, me sedujo inevitablemente el llamado Delicias de Chile, un muestrario de maravillas que incluía Tres Leches de Lúcuma, un Mousse de papaya con crocante confitado, un delicado Parfait de Murtilla y Quinoa tostada y un Sorbete de Mango Sour. No pregunten nada, definitivamente exquisito!!!

Un ambiente elegante, tranquilo y sobrio, con un servicio de primera (da gusto conversar con mozos entrenados en tantos detalles) y especialmente amistoso. En definitiva, una experiencia inolvidable.

domingo, 19 de abril de 2009

Billy Cobham Band : recital de lujo

El talentoso baterista panameño ya ha venido antes a Chile, pero pocas veces había sido tan esperado. Está claro que en la medida que visitan Chile portentosos músicos del jazz se ha ido armando un público entendido y fiel al filete jazzístico internacional.

Compré entradas con suficiente anticipación para asegurar una ubicación óptima y ver el quinteto en toda su magnificiencia musical. Lleno total en el Teatro Oriente, con gente de todas las edades, de hecho fui sorprendido con la presencia incluso de niños menores de 10 años. Notable formación están recibiendo!!!.

El quinteto formado por Jean-Marie Ecay en guitarra, Fifi Chayeb en bajo, Christophe Cravero en teclados y violín y el brasilero Marco Lobo en percusión son acompañantes perfectos para un Cobham inspirado y contundente.

La sintonía musical entre Cobham y el increíble percusionista Lobos es digno de aplausos eternos, hay una magia de sincronicidad y armonías que trasciende, hicieron vibrar al público con sus contrapuntos y desafíos de ritmos de fusión y el uso de extraños instrumentos que fueron la delicia total. Otra mención de honor es para el tecladista y violinista que puso las notas precisas, los toques mágicos para que cada pieza fuera perfecta, que lindo trabajo!!.

Un recital de dos horas vibrantes, en donde Cobham mostró porque es tan apreciado y que a sus 66 años toca la batería como nadie. Estoy seguro que eso lo sintieron los connotados bateristas que divisé entre el público, Cobham es total!!.

Cumpleaños en Amaranto : delicioso

El cumpleaños de un gran amigo siempre merece una celebración de buen nivel. Así que combinando horarios, opciones y lugares, me quedé con una selección filetaria. Me refiero al Amaranto, este rico restoran del Hotel Caesar Business que nunca me ha fallado.

Una gaseosa para mi amigo y una mineral sin gas para comenzar y visitar la carta. Llega ese pan integral negro y la mantequilla especiada para entretener al hambre y la elección gastronómica no se hizo esperar. Mi compañero eligió un asado de tira, un buen corte al estilo argentino hecho en cerveza negra con una cocción lenta que asegura el sabor y una carne especialmente blanda, acompañado de ñoquis y guiso de hongos. Un plato envidiable.

Por mi parte, solo deseaba sabores potentes por lo que decidí por un cancato de trucha. Imaginen una trucha completa en el plato, pero solo es la piel y la cabeza, porque adentro está la deliciosa carne del pescado rellena con chorizo y queso de cabra, acompañado con un puré con ají amarillo y trocitos de cilantro. Una maravilla!!

El vino, un reserva carmenere de Las Niñas 2007 (valle de Apalta), deliciosa compañía para todos los sabores de este almuerzo-celebración.

Para los postres, nada remilgados, mi amigo se sirvió uno de mis favoritos, la tarta de ricotta y maracuyá y yo me excedí con una maravilla, el mouse de queso roquefort con galletas de avellanas y dulce de higo. Extasiante!!

En fin, si de celebrar se trata, hay que hacerlo bien.

miércoles, 15 de abril de 2009

Bueno - Bar&Cocina : recién abuenándose

Descubrir nuevos lugares de disfrute es un hábito personal ya irrenunciable. Como parece suceder, una buena ubicación geográfica, hace que se roten una y otra propuesta hasta que alguna da con la oferta de valor que es premiada por una clientela fiel. Este lugar ubicado a la salida del metro Manuel Montt tiene varios predecesores y llegó esta semana el turno a Bueno Bar&Cocina.

Un local más bien pequeño, pero con una estupenda distribución de espacios. De hecho, ha sido siempre la misma ya que nadie ha cometido la torpeza de cambiarlo.

Ágil atención aunque bastante inexperta, pero debe considerarse que la idea es un pub no un restorán.

Divertido fue ver la carta de comida (Bueno para comer) y la de bebestibles (Bueno para tomar). La oferta muy precisa, tragos con base en ron, pisco, vodka, gin y wisky, además de cervezas, cocktails y vino. Un poco de cada tipo, lo que cubre una amplia gama de bebedores. Para comer, varias opciones de tablas, pizzas, sandwiches, ensaladas y la sorpresa, pastas.

Considerando la hora, opté por un sandwich en pan ciabatta con un rico trozo de filete, champiñones, queso, lechuga y pimientos asados. Delicioso (aunque quedé con gusto a poco, ya que me estimuló el apetito); lo acompañé con un rico Vodka Kurrant (como adoro los arándanos!!). En fin, lo adecuado para el momento.

El local, de diseño moderno con una linda gigantografía en la pared principal y una buena selección de música (aunque debí pedir que bajaran el volumen y felizmente se acabaron los gritos de unas locuaces damas vecinas al minuto). Promete!!

Veremos como siguen pero espero que sigan abuenándose y se queden.

Kebab Bar : sabroso y rápido

Una práctica que me genera un mejor disfrute semanal es quebrar la semana haciendo algo distinto y sabroso en un tiempo breve, digamos por ejemplo a la hora de almorzar. No solo se divide la semana en dos, sino que se renueva la energía y la sonrisa vuelve a nuestra cara.

Hoy elegí un sitio pequeño en calle Nueva York en pleno centro de Santiasco, una suerte de bar de comidas, que conocí hace un año aproximadamente. A la fecha ya posee dos locales en esta calle "tan financiera" y por la gran concurrencia, pienso que les va muy bien.

El pavo Kebab es la base de la mayoría de las preparaciones y es un acierto ya que es exquisito. Ofrecen una interesante variedad de ensaladas y algunos platos de mayor preparación incluidos ricos sandwiches en pan italiano. Aderezos especiales basados en yoghurt asi como sal especiada.

El sitio es pequeño, en donde los comensales se ubican en una barra que recorre casi todo el diminuto lugar. La atención es rápida y la comida especialmente sabrosa. Un poco caluroso al inicio de la tarde aunque finalmente todo combina bien con una decoración con reproducciones de Klimt (puchas que me gusta).

Me serví un rico plato con tapaditos árabes, pavo kebab, arroz àrabe y una suerte de pebre suave y de verdad, quedé muy bien.

En 20 minutos almorzado y con ventaja para dar una vuelta por algunas salas de arte. Rápidamente me fui a visitar la sala del Chileno Norteamericano (SAM) en donde disfruté una exposición de Felipe Sepúlveda llamada Recurso Natural, una ironía ya que se trata de representaciones digitales 2D y creaciones de cartón acerca de lo "natural" bastante bien logradas. Entretenida.

Insaciable, me fui directo a la galería Gabriela Mistral para ver la muestra de Claudia del Fierro, Vida Salvaje. Una instalación de video y gráfica (acuarelas muy lindas) acerca de una comunidad marginal en Europa. Seres que se han marginado de la vida moderna lejos de la ciudad y de la tecnología. Que envidia no?.

Total disfrutable : 40 minutos de krrtrekking y regreso al trabajo. Buen corte!!

domingo, 12 de abril de 2009

Tour de museos : MAVI con sorpresas

Una nueva versión de mi querido tour de museos domingueros. Partí por el MAC para descubrir por nueva ocasión que no siempre abre los domingos, ¿se olvidaron de los domingos de museos gratis para el pueblo?. Lamentable constatar que el MAC es el único museo que no solo cobra los domingos (eso es gratis todos los domingos desde 1991 sino que además no abre y pensar que es de la Universidad de Chile,....., mal, muy mal). Superado el malestar, entré al Bellas Artes, siempre magnificiente, tenía un par de sorprendentes salas.

Los años del Charleston, (suena antiguo no?), un recorrido pictórico por esas imagenes de esa época transgresora, de mujeres que fumaban en público (gran pecado) y que mostraban partes sabrosas de su exquisita femineidad. La mujer sofisticada, moderna que vivió intensamente esos años 20 al 30 del siglo pasado y que Rafael de Penagos se encargó de retratar en sus lindos dibujos y acuarelas en revistas de la época.

En el subterráneo del museo, me encontré con una muestra de pintores extranjeros, españoles la mayoría, una colección del MNBA. Subiendo al segundo piso, una interesante muestra de Ximena Mandiola, los números como recurso pictórico, secuencias numéricas, tamaños, formas y colores para crear intrigantes y criptográficos cuadros. Números y más números, de listas, de calendarios, de marquesinas de monedas, de relojes, números que dibujan nuestra abstracta realidad.

Caminando un poco más, me acerco a la Plaza del Mulato Gil para visitar la nueva exposición del MAVI. Segundo y tercer pisos llenos de electrónica, de voces, sonidos y sobretodo de luces y sorpresa. La exposición [re] [des] arm [o] un verdadero acierto, Roberto Larraguibel, Yto Aranda y Nury Gaviola usan la tecnología para ilustrar un universo de nuevos significados del ser y el estar, enfrentando al visitante con instalaciones robóticas, cámaras, luces, voces textos provocadores y música electrónica en una interacción a veces real y otras muy bien simuladas. Un acierto, es un nuevo universo de posibilidades.

Buen paseo!!

Cocina chilena de autor : NH gran opción

Mucho tiempo reservé esta incursión gastronómica, pero nadie sabe de verdad cuando es el momento adecuado de nada. Hoy estuve casi 7 horas caminando en una linda excursión por las montañas de la Cordillera Central y les garantizo que eso da hambre. Evidente, ya tenía una buena excusa para darme un buen regalo gastronómico.

Unn lindo hotel y el acceso al restaurant directo desde la entrada. Me sorprendió ver que solo había un pequeño grupo de personas cenando, lo demás vacío. Buena oportunidad para elegir la mejor mesa y prepararme para disfrutar algo bueno.

Como de costumbre solicité mi agua mineral sin gas, mientras hojeaba la linda carta menú que me ofrecieron. Llegó un atento joven con un aperitivo (una minúscula sopaipilla con pebre en una pequeña cuchara de porcelana, exquisita), mantequilla y pan caliente. La carta abundante en tentaciones, entradas, ensaladas, cortes de carne, clásicos del mar, pastas y sopas. La lectura de la carta me sedujo, un atún sellado a la grilla con ensalada de alcachofas y camarones con un puré de palta. Mmmhhh, tal vez un cuadril de cordero braseado con napoleón de berenjenas al pomodoro y rica mozarella con espárragos y champignones salteados o quien sabe, ese charquicán del bicentenario (ohh, charquicán el único plato verdaderamente chileno).

Agobiado de sabores, me atreví con un lenguado a la plancha sobre un risotto de palta y salsa de papayas a la crema y un crispi de jamón serrano. Si, definitivamente quería eso.

Ante la ausencia de lenguado (maldita suerte), rapidamente me ofrecen la opción de reemplazo por un congrio a la plancha, lo que finalmente quedó ampliamente compensado. El plato sabía increíble, lo gocé de inicio a fin, el risotto de película con sus trocitos de palta mezclados milagrosamente con el arroz, queso y toques de vino. Delicioso!!!

El lugar de diseño moderno, espacioso, mucha madera, con una preciosa cava a la vista en un mueble muy bien diseñado; la música deliciosa, un jazz vocal con una fémina de voz maravillosa. Tranquilo y bien atendido, este lugar promete.

Es increíble la combinación del pescado con el manjar de una papaya, no imaginé cuan rico podía ser. Sabores chilenos y universales, un plato notable.

Para acompañar esta maravilla, nada mejor que una copa del reserva pinot noir Céfiro, un delicioso vino de Casablanca. Exquisita combinación.

Para los postres, decidí experimentar con una mixtura culinaria, una trilogía al carmenere, con un navegado, un helado de carmenere y un borrachito. Sorprendente, nunca había probado juntos estos chilenísimos sabores.

Gran acierto, NH sabe de comida chilena

Sebastián Jordan Quinteto : gran jazz

Hace varias semanas que no aparecía por Thelonious, mi lugar favorito para el jazz en vivo. Esta noche tenía buenas promesas considerando la maestría de los músicos. Partiendo por Jordán en trompeta y composiciones, el increíble talento de Félix Lecaros en la batería, el inconfundible toque de Pablo Menares en el contrabajo, el sonido preciso de las notas de piano de Lautaro Quevedo y el virtuosismo incomparable de Agustín Moya en el saxo. Un filete por donde lo miren.

Llegué a punto, mientras ajustaban los últimos detalles técnicos en el escenario y con tiempo suficiente para pedir un trago y ensayar algunas fotografías antes del espectáculo.

La maravilla musical se desarrolla sin interrupción, temas exigentes, con ritmo y talento, van haciendo efecto en una abundante audiencia (sorpresa en un fin de semana largo), hay onda y los aplausos abundan ante el despliegue musical. Jordan y Moya se disputan el estrellato con toda la potencia de sus virtuosos pulmones, mientras, apenas detrás, los pulsos graves del contrabajo y las delicadas notas del piano hacen su contrapunto con la virtuosa batería de Lecaros.

Gran noche, gran tocata, el buen jazz sigue vivo en Santiasco!!

lunes, 6 de abril de 2009

Cenando en Guría : españolada deliciosa

Estas cálidas noches de abril invitan a cenar afuera, aunque cuando ya es un poco tarde no son muchos los lugares disponibles.

La verdad llegamos muy tarde al Guría, con bastante hambre y con muchas ganas de conversar. Partimos pidiendo unas heladas sangrías (españolas de verdad) las que permitieron estabilizar la temperatura corporal y de paso estudiar apropiadamente la carta.

Hace poco más de un año que había cenado en este sitio y bien merecía una recarga. Como aperitivo -una delicia- los pimientos al piquillo, especialidad con farsa de cerdo, queso de cabra, menta y una salsa vizcaína. Fantásticos!!!

La calidad de la atención constato, ha disminuido, no obstante sigue siendo de buen nivel a pesar de la avanzada hora de nuestra visita. De la carta elijo un Solomillo de cerdo relleno que me parecía notable (relleno de rúcula, jamón serrano, puré de albahaca, queso de cabra con una salsa de mostaza y miel), pero contra todo pronóstico, no había y no me lo advirtieron !!!. Gran decepción no?

Sobre la marcha y con los minutos contados antes que se marchara el chef, decidí por una Merluza a la Ribereña (un rico filete de merluza a la plancha con una salsa de tomate concase, julianas de jamón serrano, ciboulette picado, mantequilla y crema acompañado de un deliciosos couscous con champiñones y menta). Un plato magnífico, que pareaba perfectamente con el plato de Merluza Bravísima (también filete de merluza a la plancha con mantequilla rubia, camarones, alcaparras y merken acompañado con un rico risotto con esparragos y queso parmesano) que mi partner sabiamente eligió.

Para platos tan sabrosos y delicados, no quedaba alternativa que no fuese una botella de un buen pinot noir y la elección fue del Valle de Casablanca, un reserva colección privada Céfiro, fantástico. La combinación marcó puntaje de excelencia, demasiado rica.

Para los postres, coincidimos que lo mejor era una natilla con berries, imperdible!!. Un delicioso término mientras se escuchaba un lindo tema de Björk.

Bravo por Guría, sigue siendo un gran filete.

jueves, 2 de abril de 2009

Zabo : gran opción en Santiasco centro

Hacer un alto en la semana para almorzar rico y reponer energías limpiando la mente, no solo es deseable sino que es posible de hacer aún en Santiasco Centro.

Zabo es un sitio que apareció hacia agosto 2008 en la Plaza Mulato Gil y por lo tanto goza de una de las mejores terrazas del Centro. Un lugar de diseño moderno, por lo demás se autodenominan el primer restorán de sushi y cocktails y verdaderamente tienen una variedad increíble de cocteles a lo que añade una calidad de servicio sorprendente.

Una deliciosa brisa en la terraza y música chillout de buen nivel, fue la bienvenida. Una rápida incursión del mozo para comentar el menú del día y dejarme la carta de comida y de cocktails.

Para comenzar unas deliciosas gyosas de camarones a las que siguió un plato de salmón teriyaki exquisitamente preparado. Una copa de buen Malbec argentino, profundo y delgado, dio los tonos precisos para este frugal almuerzo de media semana. Delicioso y rápido.

Quedé con algunos minutos, los suficientes, para visitar en el mismo lugar el museo MAVI con la exposición El Arte de Amar, un lúdico recorrido con pinturas y esculturas acompañadas de estribillos de canciones de amor muy populares.

Rica experiencia y muy bien por Zabo.