lunes, 31 de diciembre de 2007

Recomponiendo la realidad : mejor ropa y algo más

Este último día del año, por fortuna no hábil en mi oficio, vestí mi nueva tenida de krrtrekking, un regalo de exquisito buen gusto que recibí en estos días de navidad, para salir de compras (algo que no me gusta por definición, pero que hoy era indispensable).

Me fui directo a Chile Montaña (http://www.chilemontana.cl/), una tienda especialista en implementos para montaña. Mi percance del fin de semana, no me dejó impávido y decidí que tenía que resolver el cuento con buena asesoría. Tras una conversación de más de dos horas, me nutrí de buenos consejos, aprendí de materiales nuevos, conocí ropa increíble (que me habría sido muy útil de haberlo sabido) y adquirí una tenida técnica completa para hacer frente a mis nuevas aventuras, preparado como corresponde. Salí de la tienda pensando que si hace diez años hubiera necesitado algo como esto, no habría podido encontrarlo, ya que el desarrollo de estas tecnologías es bastante reciente. Me maravillo del ingenio humano que aprende copiando de la misma naturaleza y lo reproduce a voluntad (por ejemplo el pelo de oso polar).

Contento de haber hecho una buena inversión, me fui a recorrer librerías para dejarme seducir por algo nuevo. Encontré un par de títulos, uno ya conocido pero que será un buen regalo para alguien quién, a pesar de su abultada edad, no ha descubierto como fue mortalmente condicionado por sus padres para tener los comportamientos que detenta (de Alice Miller, El drama del niño dotado). El otro libro, también pretendo regalarlo, pero no resistí la tentación de leerlo primero, magnífico, estaba mal clasificado en la tienda, pero por fortuna ya que si lo hubiese buscado no lo habría encontrado. No lo comentaré para dejar el asombro intacto en quien lo recibirá. Me acompañó deliciosamente en el almuerzo que vendría.

Después de esta incursión consumista (al fin y al cabo, hay días que tengo que salir de compras), decidí que el último día del 2007 bien merecía un regalo gourmet, así es que me fui presuroso a mi tetería predilecta, que en realidad es un gran restorán francés, Le Flaubert.

Me instalé en la terraza, adoro las terrazas en verano, para solicitar antes que todo, la carta de vinos. Esta vez, quería disfrutar un vino espectacular y encontré un Pinot Noir Leyda del Valle de San Antonio (gran terroir para esa cepa). Añadí entonces, una deliciosa Corvina Flaubert, un buen trozo de corvina cocinada al vapor, cubierta con una salsa de mantequilla, camarones y cubitos de palta, rociada con toques finos de perejil y acompañada de unas papas cocidas al dente, a las que espolvorée delicadamente con pimienta. Un plato espectacular aunque me quedé pensando que en vez de papas podría haberse acompañado con algo atomatado, quizás un couscous al tomate, en fin, igual estaba delicioso y bien maridado con el tinto que mantuve a buena temperatura en una cubeta con agua y hielo.

De postre, elegí un helado de maracujá, 100% fruta y preciosamente presentado, una maravilla este Sol de Maracujá. Luego, como casi es obvio, pedí un rico té verde perfumado, el Pharaon, pletórico de aromas de papayas, fantástico.

Con mi sistema digestivo trabajando por placer, me fui a rastrear buena música. llegué a la galería El Patio para visitar mi disquería preferida, Kind of Blue. Tras escuchar varios CD's, me regalé un disco del talentoso Pedro Greene, Pebre, un disco antiguo que no había encontrado antes.

Gran día, ahora solo queda esperar el cambio de año. Chao 2007, gracias, lo disfruté mucho.

domingo, 30 de diciembre de 2007

Intentando La Leonera : buen aprendizaje

De un tiempo a la fecha, he estado relatando mis aventuras de novato en la montaña, especialmente con los entretenidos miembros del Club Los Malayos (http://www.malayos.cl/).

Este fin de semana, ibamos a intentar subir nuevamente el Cerro La Leonera (justo al lado del Cerro El Plomo), para lo cual nos juntamos el sábado pasadas las 9 de la mañana (por suerte no fue de madrugada esta vez) en Plaza Italia.

Tras una espera mediana, llegamos 8 personas al encuentro. Tres chicas y el resto varones, todos entusiastas deportistas de fin de semana. Esta vez nos embarcamos en un transporte escolar (una metáfora del proceso de aprendizaje, no creen?) y tras un par de horas de viaje llegamos a la parte más alta de La Parva, cerquita del último andarivel.

Allí, tras embetunarnos de bloqueador solar y poner nuestras mochilas en la espalda, iniciamos el largo camino hacia La Leonera.

No bien habíamos pasado el primer gran desafío, un ascenso por un cerro de acarreos desafiante, comenzó a sentirse un viento helado muy fuerte. Nos acompañaron las ráfagas gélidas casi todo el camino, mientras en el cielo se movían presurosas muchas nubes oscuras. Todo me hacía sentir que pasaba algo distinto a mi anterior incursión. Tuve que detenerme para abrigarme, ya que el frío se hacía notar. Me agregué dos capas de ropa y continué la travesía.

Poco rato después, el viento era tan intenso que hasta perdí el equilibrio un par de veces. La visibilidad se disminuyó ostensiblemente por la bruma que pasaba entre nosotros con gran rapidez. Sin amilanarnos continuamos hasta que nos acercamos a la explanada de Cancha de Carreras, en donde haríamos campamento.

No habíamos alcanzado a acomodarnos, apenas armada la carpa con mi cordada (mi simpatiquísimo compañero peruano Clever) cuando se puso a nevar. La verdad se puso muy helado y a pesar que había averiguado (internet mediante) que la isoterma cero estaría a 3.700 metros, no imaginé que el frío sería un gran tema en esta excursión. Estabamos en ese lugar a 4.200 metros de altura aproximadamente, nevando copiosamente y salvo las carpas, nada en donde protegerse.

En menos de una hora, el frío ya me hizo sentir insignificante, pues todo lo que yo había aprendido de capas de ropa y materiales técnicos se fue por la borda. Tenía puesto TODO lo que llevaba y estaba muerto de frío. Lo que vendría a entender mucho después que hay ropa y hay ropa, en buen chileno, malgasté dinero en ropa técnica de promesas y no realidades. (me dan ganas de hacer un pasquín denostando algunas tiendas, pero debo aceptar que la compra de un ignorante es tan mala como la venta de un embaucador).

Me metí en la carpa buscando guarecerme de las ráfagas de viento y allí comencé a comer frenético, necesitaba calorías pues la naturaleza, veleidosa, me las robaba con cada arremetida de viento. Lo cierto, es que guardando la calma con ayuda de mi mente entrenada, decidí abordar con humildad el trance. Terminé de comer, ejercité mis músculos buscando generar calor y me metí en mi saco para -20°c. Resultó tan decepcionante como un comercial, pues mis pies estaban helados, mis manos también y la sensación que me inundaba es que me estaba congelando. La temperatura exterior marcaba -4°c, pero con el terrible viento, la sensación térmica, era claramente mucho menor, quizás unos -15°c. Según algunas tablas que he consultado es posible que haya sido peor, pero para el caso, pague con creces mi ignorancia.

Fue una noche terrible, las ráfagas de viento levantaban la carpa y amenazaban en cada segundo romper o llevarse la carpa, nuestra pequeña guarida. Mi compañero se quejaba de frío y yo por pudor no dije nada, pero me moría de frío. Frotaba mis pies y manos tratando de generar calor y si bien lo conseguía, no duraba más que unos segundos. Varias veces durante esta noche vientos terribles, pensé que la carpa se hacía trizas y quedábamos botados en la noche para ser candidatos de una hipotermia galopante. Fue heavy.

Cerca de las 5 de la mañana, hora acordada para iniciar el ascenso a La Leonera, me di cuenta que era un suicidio salir y simplemente ignoré el tema, tal como lo hicimos casi todos. Como siempre hay alguien mejor preparado que estaba en condiciones de asumir el desafío, pero en este caso, estuvo solo en el proceso (lo siento por el gran malayo y amigo Hernán).

Cerca de las 7:30 horas somó el sol, más bien se sintió su agradable calor y decidí interrumpir mi insomnio gélido y salir fuera de la carpa. me puse a caminar y de a poco a entusiasmar a los demás a que tomáramos un buen y caliente café. Con buen ánimo y grandes ojeras, fueron saliendo todos de sus carpas y poco a poco, la noche quedó atrás y pudimos desayunar y bromear acerca de la tormenta en la cual estuvimos metidos esa noche.

Alrededor de las 10:30 horas desarmamos campamento y decidimos alcanzar a nuestros compañeros malayos que ascenderían domingueramente el cerro El Pintor. Así que caminamos y llegamos a tiempo para disfrutar una dieta malaya en la cumbre de El Pintor como corresponde. Deliciosos alimentos gourmet y mejor onda, para cerrar un capítulo que mejoraba ostensiblemente con el paso de las horas.

Aprendí mucho de esto, enfrentados a la naturaleza no somos nada, ropa técnica mediante (siempre que sea verdaderamente de calidad) podemos soliviantar algunos aspectos, pero al final, solo compensamos y tratamos de adivinar lo que en la profundidad es propio de la naturaleza que nos rodea. Nuestra soberbia tiene demasiados límites ante el universo poderoso de la montaña.

Con profunda humildad, espero estar mejor preparado para la próxima vez. Aplicaré de verdad algo que me enseño una persona increíble, no existe el frío, solo la mala ropa.

Tres regiones : nuevo restorán peruano

De toques sencillos y bien ubicado en el pletórico barrio de Manuel Montt, se ubica este nuevo restorán peruano, que visité recientemente.

Una casona antigua, de paredes blancas y mínima decoración, muy peruana toda y con un pequeño pero interesante patio, una terraza para los que gustamos esa sensación de estar al aire libre disfrutando algo rico.

Lenta atención, los chicos peruanos se toman su tiempo para aparecer, aunque tras un pequeño diálogo cuestionador, todo comienza a rodar. Mesas con mantel y buenas copas de cata, preludian una sesión interesante. La carta, muestra una gran variedad de platos, algunos claramente inscritos en la fusión peruana (con muchas otras culturas gastronómicas).

Tras superar el impasse inicial, pedimos unos platos llamativos, un arroz chaufa adobado en soya con camarones salteados y unos fettucini con camarones (deliciosa debilidad la nuestra) y salsa huancaina, acompañados de un delicioso carmenere cuvée de Misiones de Rengo, que hizo un contrapunto excelente con estos platos exquisitos.

El restorán promete, debe perfeccionar los ritmos de atención, la cocina está notable. Se suma positivamente al circuito gastronómico peruano de Santiasco.

Blue Jar : mi anexo de oficina

Por diversas circunstancias, entre que no hay espacio, hay poca privacidad, no se puede fumar y otras tantas restricciones, he creado un anexo de verano en este rico lugar para algunas de mis actividades laborales. Así, además de trabajar, puedo disfrutar de este oasis en el microcentro santiasqueño, beber ricos combinados de jugos naturales o bien cortados de buen café.

Debería ser regla de las oficinas modernas permitirse espacios en una interacción cosmopolita más completa, más disfrutable y por cierto, sensiblemente con mejor resultados.

Bienvenidos al Lado B de la post modernidad, trabaje y disfrute, no hay problema.

domingo, 23 de diciembre de 2007

Tour de museos : un acierto dominguero

Con cierta regularidad y tratando de apuntarle a los cambios que se hacen en las diversas salas de los museos, hago este delicioso tour y vaya que valió el esfuerzo de salir con el tremendo calor de Santiasco.

Partí en metro hacia Quinta Normal, el primer destino el MAC. Una gran exposición que ocupaba gran parte de las salas del segundo piso. Provocadora muestra. En la sala 6a encontré una delicada metáfora visual, desechos industriales, zapatos rotos y nichos del cementerio, todo lo que se bota finalmente reunido. En la sala 6b, prepárense para una sorpresa auditiva.

Después, en la sala 10 me sorprendí con un video casero. Una cámara quieta filma continuamente, mientras un tipo sale de la casa desde donde se filma y deja un cuadro de pintura nuevo en un cerro de bolsas de basura en la calle. Luego regresa y la cámara espera. Pronto aparece el camión recolector de la basura y uno de los recogedores de basuras, lo descubre y comienza a admirarlo. Se baja el conductor del camión (normalmente es el jefe de la cuadrilla) y comienza a forcejear con el primero para quitarle el cuadro. Tirones, golpes y rompen el marco del cuadro. Contento con su conducta iconoclasta, se burla del trabajador que descubrió el arte. Finalmente, tras varias miradas y remiradas al cuadro, lo botan con el resto de la basura. ¿de tanto recoger basura, necesitan que todo sea basura?. Fuerte.

En la sala 11, algo divertido, una alfombra con calcetines cosidos los que fueron recolectados entre muchas personas y cada una de ellas eligió una canción que le gustase. La invitación es a bailar y mirar los calcetines mientras se escuchan cientos de canciones seleccionadas.

Salí rumbo al M100, donde siempre hay algo bueno. Esta vez, fui afortunado porque pude vivir completamente solo una experiencia aterradora. (Uuuh). La obra ¿Dónde Están? del famoso y talentoso Iván Navarro. Me pasan un diario de tapas negras con el mismo título de la obra y una linterna. Luego caminé por una plataforma que sube hasta la entrada de la sala, lugar en completo silencio y oscuridad salvo por unos fluorescentes rojos. La linterna, pensé, es para poder caminar en la plataforma que sigue ascendiendo bordeando un espacio central. Pero había una sorpresa, abajo un mar de letras, las que iluminadas por la linterna permitía encontrar nombres de asesinos, torturadores y esbirros de la dictadura militar. Cual sopa de letras, hay nombres en la horizontal, vertical y diagonales, todos y cada uno de ellos han sido procesados aunque la mayoría no condenados por la justicia. La atmósfera se vuelve compleja con el descubrimiento y comencé a sentir claustrofobia. Terrible, ahora no se pregunta por los detenidos desaparecidos sino por ellos, los que todavía caminan por Chile cargando en sus consciencias la maldad desatada.

Regresé al metro Quinta Normal y me percaté de una muestra de afiches de grandes películas, lo que fue un lindo contrapunto visual, ya que en la estación en que me bajé, Bellas Artes, había una muestra de fotografías de la Pequeña Gigante, recuerdan su paso por Chile. Maravillosa.

En el Bellas Artes, todavía está la muestra fotográfica de Robert Frank, no se la pierdan. En el primer piso dos nuevas exposiciones, la que me gustó mucho fue la de Ruperto Cadiz, gran imaginación, entretenido y provocador.

En el MAC del Forestal, Juan Gómez Quiroz juega con las deformaciones de las imagenes como si fueran los espejos de una feria de diversiones, muy notable la habilidad. En el zócalo, una muestra inquietante. Colgados de fierros con ganchos, cual carnicería o matadero, unas extrañas figuras de grueso cuero, asemejando vestidos o algo así, con delicados bordados y tatuajes. Una muestra de escultura y provocación del galés Dai Rees.

Última parada, visité el MAVI en el paseo Lastarria. Variada muestra con videos y pinturas. Sorprendente el cuadro titulado Mariella de Daniela Kovacic y una juguetona propuesta de Carlos Zúñiga con su Detenido en Apnea, en donde usando guías telefónicas y tinta china configuró un collage tremendo y si se tiene paciencia se puede sacar hoja por hoja en orden y llevarse el cuadro a casa. Hay miles de copias disponibles.

De regreso, observé que en El Biógrafo están dando la última película de Michael Moore, SickO. No se la pierdan, las semejanzas con Chile no son casuales.

Miles : "mails" servicio

Ir por una sesión de Jazz y Bossa, fue una tentación irresistible para el día sábado. El destino, el club de jazz Miles de Bellavista.

Llegué sobre la hora anunciada de comienzo del show de Ana María Meza, un sitio bastante lleno con muchas parejas y pequeños grupos de amigos. Tras una espera superior a los 15 minutos, sin que se acercara ni se viera mozo alguno (aunque circulaba una gran cantidad de personas que parecían trabajar o pertenecer al lugar), me levanté y fui a pedir directo al bar mi trago jazzístico (un buen ron). No pude evitar reclamar por el mal servicio y la explicación fue doblemente triste, una chica se había accidentado y por lo tanto solo había un mozo para todo el local (además del barman), triste no, pero también triste que no tuviesen un plan B para atender el lugar.

Hace tiempo que no iba al Miles y la verdad que es un sitio bonito, bien ubicado, con buena amplificación e iluminación, pero en franco deterioro de su calidad de servicio. Que mal.

La voz dulce y bien formada de Ana María Meza y buenos músicos, salvaron la experiencia, ya que fue un delicado desfile estilístico de jazz tradicional y buen bossa nova.

Miles, tienen que mejorar.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Bajofondo : totales!!

Jueves 20 pasadas las 22:15 horas, se deja caer la música electroacústica del grupo bajofondo en el Teatro Caupolicán. Bastante lleno el lugar y solo fans, porque el delirio se desató con los primeros acordes de la fascinante e inclasificable música del grupo. Con gran potencia en los parlantes y una buena combinación de luces y proyecciones (una chica a cargo), el show fue un éxito desde el comienzo.

En menos de una hora, ya tenían a todos bailando, saltando y dando el mejor jugo electrónico. Un paseo por los temas más famosos de la banda, para llegar a una suerte de intermedio virtuoso. El gran Martin Ferres nos deleita con su maestría en el bandoneón. Luego van apareciendo otros instrumentos acústicos, hasta que se vuelve a conformar el grupo y el power nuevamente hace vibrar el teatro. Músicos virtuosos, la voz potente de Santaolalla incluso superpuesta sobre su propia voz en las bases electrónicas, rapeados y hasta intervenciones de mix y scratch del virtuoso Supervielle.

Dos horas de show y tres bis notables dieron por terminado el show y sin detenerse un segundo partió un carrete electrónico de miedo.

Extraordinario espectáculo, original, potente y bailable.

miércoles, 19 de diciembre de 2007

UVA en Ñuñork

Ir en busca de nuevos locales disfrutables sigue siendo un deporte que me gusta practicar.

Llegamos a Ñuñork pasadas las 20 horas y no pude ser más afortunado pues mis ojos solo vieron un local, un restoart llamado UVA (unión Vino & Arte), un concepto novedoso, una galería de arte que es asimismo un restobar con happy hour y todo.

Lindo lugar, de paredes blancas con hermosas pinturas de diversos autores en exposición. Un mobiliario moderno y cuidadosamente seleccionado en donde cada mesa tenía dos copas de cata bien puestas. Una invitación clara a disfrutar.

Buena música deep house y atento servicio. Revisamos la carta, para descubrir una amplia oferta de tragos, tablas para armar (interesante), vinos y comida.

La elección partió por definir un vino, queríamos un buen Pinot Noir que la carta ostentaba, pero no había Pinot Noir. Que mal........... Recuperado del impasse, llegamos a un acuerdo con el dueño, tenía unas botellas (fuera de carta) de unos ensamblajes de Pinot Noir y Carmenere (que raro no?) de Cavas Submarinas (Itata Valley), que decidí experimentar tras una importante rebaja en el precio (debía pagar el costo de ofrecer algo por lo que no tenía)

Armamos una tabla con ostiones en salsa de jenjibre, salmón ahumado y unos camarones rebozados en coco. Todo en concordancia con un esperado maridaje con este vino misterioso, que en una cubeta con agua y hielo hice enfríar.

El vino interesante, cierta complejidad de aromas y un inesperado final de suave carmenere. Había que enfriar más hasta llegar a unos 15 grados y ahí se puso especialmente sabroso.

La conversación fluyó rauda, realidad o percepción, poesía o palabras que emocionan, en fin, muchos temas interesantes, una puesta al día de experiencias y demasiadas cavilaciones.

Sabroso lugar, recomendable a pesar de sus desaciertos de aprovisionamiento.

Puerto Fuy : otra deliciosa opción

Entre los restoranes que aparecen en Nueva Costanera, comuna de Vitacura, se encuentra Puerto Fuy. Barrio cuico y turístico, pero interesante.

Armado en una amplia casa del sector, este lugar se distingue claramente por su cocina, pues la decoración es profundamente minimalista.

La primera sorpresa es que cada pausa gastronómica se acompaña con un bouquet de degustación. En buen chileno, un bocado de algo sorprendente que no sabes que es hasta que lo comes. Lo dejo a la imaginación ya que es una nota de distinción del local.

Partimos con un pulpo glaceado en salsa de anguila sobre una papa rosti con panceta y coulis de tomate emulsionado en aceite de oliva, divino. Rica textura, adecuada temperatura y un sabor agridulce extraordinario. Pausa.

Aunque el maridaje de vinos no es el fuerte del lugar, el ensamblaje de cabernet sauvignon-syrah, no estaba nada mal, seguimos con un Mero con alcachofas barigoule y coulis de tomates (un cuadrante de pasta de aceitunas que encierra un batido de tomates) en un plato que parece una pintura de Joan Miró. El desplante visual se agradece, ya que el goce es multisensorial.

El postre, magnífico, en un plato gigante se conjugan sabores de helados, mouses, chocolates y mermeladas. Gran trabajo del chef

Luego, solo queda tomar un buen café y saborear un cigarrillo (zona de fumadores pueh!)

Gran lugar, merece ser conocido.

Xampanyet : celebrándonos

Este martes 18/12 a las 19 horas teníamos evento laboral de celebración de un año de trabajo, aunque verdaderamente fue una celebración de un año juntos de un gran equipo de trabajo.

En las cercanías de la estación del metro Salvador se encuentra este viejo local de happy hour, con una carta de tablas, sandwiches y sushis para acompañar una extraordinaria lista de tragos. Debe ser una de las cartas de tragos más completas de Santiasco, diversa, impresionante y sobretodo seductora.

El lugar no es muy grande pero tiene personalidad. De hecho, hay que tocar el timbre y esperar que te abran. Para un día tan caluroso, era obvio que adentro habría calor, aunque con una buena motivación, eso es un dato.

Considerando la diversidad de tragos disponibles y el acompañamiento de sushis y empanadas japonesas de camarones y cerdo, la verdad que el cuerpo vaciló firme en el placer. Cada cual eligió su alcohol preferido y el resto fue hacer variantes creativas alrededor. La música ochentera y el humo de los cigarrillos completaron la atmósfera de una celebración sinigual.

Antes de las 21 horas el local estaba lleno, lo cual habla de su potencia convocadora. El resto, es la buena onda de todos quienes, tras la agotadora jornada laboral, llegan a sentir y disfrutar la vida como corresponde.

domingo, 16 de diciembre de 2007

Cerro La Leonera : dicen que es fácil

Con un cordón montañoso único en el mundo, Santiago ofrece increibles opciones a la hora de hacer algo de montañismo. Este fin de semana, fui invitado a ascender un cerro de la categoría 5.000 metros.

Me levanté a las 6 de la madrugada del sábado ya que a las 7 me pasarían a buscar. Como era una novedad en mis carretes, asumí casi todos los consejos de mis amigos más experimentados, aunque con las limitaciones de mi escaso equipamiento y algunos prejuicios personales (como por ejemplo, nunca tanto frío). Cargué alimentación adecuada para el esfuerzo, ropa, utensilios y buena onda (era un viaje a lo desconocido).

Con cuatro participantes en la camioneta, nos dirigimos hacia los centros invernales de Santiago (Farellones, La Parva, etc.) y subimos en la 4x4 hasta el último andarivel, en donde estacionamos. Un día que prometía bastante calor. Tras unos minutos de espera, se juntó un grupo de 15 montañistas, la mayoría de los cuales pertenecientes al Club de Los Malayos (ya les conté sobre ellos).

Tras los saludos de rigor, cargamos en los hombros nuestras mochilas. La mía pesaba más de 20 kilos, mucho más que cualquiera de mis otros paseos. Pero bueno, siempre hay una primera vez, sobretodo si llevaba una carpa y suficiente agua para cubrir mis necesidades de hidratación que son bastante más que las del resto (la hiperhidrosis me pasa la cuenta).

La caminata hacia Cancha Carrera fue fulminante para mi cuerpo, aunque hicimos un tiempo impecable a pesar del ardiente sol que nos acompaño. En el punto en que confluyen las rutas hacia el Cerro El Pintor y al Cerro La Leonera, nos detuvimos a almorzar pasadas las 14 horas. Estuvo exquisito, incluso con un temblor bastante fuerte que se hizo sentir mientras estábamos en el lugar.

Seguimos hacia el lugar en donde haríamos campamento a 4.200 metros de altitud. Allí empezó a flaquear la fortaleza física pues el dolor de cabeza mío y de varios compañeros se hizo notar. La puna comenzó su trabajo.

Armamos campamento y nos dispusimos a preparar una temprana y potente cena. Contra todas mis definiciones personales, cenamos antes de las 19 horas y con un sol a todo dar. Como sea, cerca de las 20 horas, casi me averguenzo de comentarlo, me metí a mi carpa y me dispuse a dormir.

Falso, no dormí nada. Cometí un gran error y dejé los sacos de dormir con la cabeza más abajo que los piés (terreno de cerro no?) y luché toda la noche con el frío (tenía puestos 3 camisetas, un polar, un gorro de lana y dobles calcetas en los piés, además de los pantalones y mi saco para -12 °c) y el ahogo (la sangre se iba a mi cabeza y como hay poco oxígeno, lo tomaba todo y mis pulmones reclamaban con la sensación de ahogo). A alguna hora de la madrugada, me di cuenta de ello y con el implícito permiso de mi cordada (mi compañero de ascensión), di vuelta mi saco y creo que dormí diez minutos, ya que a las 4 de la madrugada sonó mi despertador. Bueno, la inexperiencia se paga, así que me puse un cortavientos, mis botas de montaña y salí de la carpa al espectáculo de una noche estrellada maravillosa (¡ en Santiasco!). Fue divertido ver mi mochila congelada en las afueras de la carpa. Armamos un desayuno potente con nuestras linternas de cabeza (sin ellas no se ve nada) y pasadas las 5 de la madrugada salimos rumbo a La Leonera. En el proceso quedaron algunos apunados en el campamento y el resto, le dimos con todo hacia las alturas.

Tras más de 3 horas de incesante ritmo, llegamos a la cumbre de La Leonera, increíble. Subí con mis dedos de manos y piés congelados, que desagradable sensación, pero no podía hacer nada excepto usar mi mente para obligarlos a moverse. La verdad es que casi no me di cuenta que había llegado a la cima, hasta que comencé a recibir abrazos de felicitaciones. Que lindo, cada logro en la montaña se celebra como si fuera único, me emocioné con la simpleza del gesto y la profundidad de los significados. Cada cual llega por su propio esfuerzo, no hay otra forma. Me tomaron algunas fotos que espero recuperar para recordar la emoción de ese momento. Es increíble el espectáculo de las grandes montañas observadas desde la altura. Hasta se veía el Aconcagüa.

Tras unos 20 minutos en la cumbre, el sol estaba muy fuerte y además comenzó a llegar una delegación de montañistas de la UC, no cabían todos así es que comenzamos el descenso.

Retornados al campamento, me volvió el dolor de cabeza (raro, pero solo me ocurrió en ese lugar), así que con un remedio personal basado exceso de hidratación y alimentación finalmente solucioné el problema. De paso, recuperé la sensación de tener dedos en manos y piés.

Decidí preparar el regreso, desarmando carpa y ordenando mochila y apenas terminaba, cuando una nueva sorpresa apareció, se puso a nevar!!!!.

Bajamos en medio de una increíble nevazón, hasta encontrarnos con una delegación de Los Malayos que habían subido El Pintor y nos esperaban con una dieta Malaya, agua mineral, café de grano y turrón uruguayo. ¿quién desea más?. Me encantan Los Malayos.

Continuamos el descenso y aproveché un largo tramo para hacer surfing en rocas, es decir, deslizarme por una ladera de acarreo como si surfeara, es increíble, aunque anoto dos caídas divertidas y una con resultado de una herida en mi rodilla derecha. Además de mi cara quemada a pesar del bloqueador solar.

Gran fin de semana, mi primer 5.000 (aunque realmente es un poco menos) y una experiencia deliciosa de compañerismo, naturaleza y buena onda. Salvo por el hecho que me duele todo, no fue tan difícil....... ufff

Dominó : rápido y sabroso

Hay días en que me asoma un deseo irrefrenable a la hora del almuerzo. Algo pecaminoso, rápido y delicioso.
Cerca de las 14 horas, con un hambre galopante, invité a un partner para ir al Dominó. Al local original, en Agustinas casi al llegar a Ahumada.

Conocedores de los códigos, apenas conseguimos un pequeño espacio en uno de los mesones, la solicitud no se hizo esperar, dos Italia Tomate Abajo y jugos naturales. Devoramos los deliciosos y pecadores manjares, cruzamos miradas y obviamente, pedimos repetición.

El Dominó es un lugar magnífico de comida rápida, cocina a la vista, muy higiénico, rápido, muy buen servicio y sobretodo, estándares de calidad que permanecen.

Bravo, existe comida rápida rica y casi sana en Santiasco.

martes, 11 de diciembre de 2007

Blue Jar : deliciosa opción

Hoy fui invitado a almorzar en el microcentro de Santiago. El lugar lo conocí bajo el nombre Frederik's y guardo muy buenos recuerdos de mis visitas. Desde el punto de vista de infraestructura es básicamente el mismo restorán que conocí antaño. Sin embargo, me sorprendí con un menú de campeonato.

Partimos con una colorida sopa fría libanesa de langostinos, yogurth, tomate y pepinos. Muy equilibrada y sabrosa. Buena preparación para el paladar. Enseguida, una atención muy rapida (que se agradece), llegó una bruschetta grillada con habas (peladas y partidas por supuesto), hojas de menta, una buena ricotta y prosciutto crocante, magnífico el juego de sabores. Finalmente, el plato mayor, un pescado ricamente marinado a la plancha sobre una salsa de pomposo nombre que llevaba verduras y especias exquisitas. Con tanta efervescencia de sabores, solamente quedaba probar que vendría de postre y resultó ser una copa con trozos de mango, piña y naranjas, finamente combinados y alguna semillas que matizaban el amarillo fulgor de tan rico postre.

Como es obvio, una copa de vino acompañó el deleite y un cierre de buen café, para este almuerzo céntrico.

Completamente repetible, volveré!!!!

domingo, 9 de diciembre de 2007

Palmas de Ocoa : gran paseo dominguero

Levantarse a las 6 de la mañana un domingo no suena a buen carrete, pero si valió con creces el esfuerzo. A las 8 de la mañana en la Copec después del primer peaje rumbo a la quinta región, comenzaron a llegar Los Malayos. Gran convocatoria, llegamos 25 entusiastas excursionistas.

A menos de 100 Km de Santiago, en la Cordillera de la Costa, se encuentra este Parque verdaderamente precioso. Palmas centenarias, peumos y muchos arbustos, dan marco vegetal a senderos de muy fácil tránsito y el hermoso Cerro La Campana proporcionó un fondo ideal.

En menos de dos horas ya estabamos, con nuestras linternas, recorriendo una vieja mina de cuarzo. Extraordinaria sensación, afuera un calor tremendo y adentro, húmedo y frío y en la más completa oscuridad. Al respirar salía vapor y en poco rato ya teníamos los bolsillos llenos de piedras. Claramente ibamos a descender con más peso que cuando subimos. Que simpático.

Una vez que llegó todo el grupo, iniciamos un descenso para enrutarnos hacia otro sector en donde hay una cascada sensacional. Ese sería el paisaje que tendríamos enfrente del mirador en donde almorzaríamos.

Comenzó el desfile gourmet, aceitunas rellenas de pimiento, pasta de salmón, queso azul, paté de emú, en fin, exquisito. Solo faltó el vino que torpemente olvidé llevar. No volverá a ocurrir, se necesitaba un rico vino para tantos manjares. Después de los postres, ciruelas, turrón uruguayo y frutas, tomamos un buen café de grano y descansamos.

Tras las fotos de rigor, comenzamos a regresar. Pasadas las 16:30 horas, ya estabamos en el estacionamiento, para despedirnos y volver a Santiasco.

Gran paseo!!!!

sábado, 8 de diciembre de 2007

Jindabyne : una película inquietante

Qué harías tú si saliendo de pesca con tus amigos, te encuentras en el río un cadáver???
Esta película explora las culpas, las implicancias emocionales y las respuestas sociales a un fenómeno como ese.

En este caso, los comensales deciden que el cadáver está lo suficientemente muerto como para hacer algo. Así anuncian el tema despúes de tiempo y deben enfrentarse a la indignación del pueblo y sobretodo de sus familiares directos.

Es una película compleja en códigos, pero al final digerible, ya que exacerba los conflictos naturales de toda pareja y comunidad de amigos y especialmente de aquellas que acumulan temas no conversados.

Parece inconclusa, pero esta película se resuelve en nuestro interior, jugando con nuestro ethos y nuestra capacidad de amar.

Melissa : jazz y belleza

Melissa Aldana regresa de vacaciones a Chile, ya que se encuentra disfrutando de una beca en Berkeley financiada por el gobierno chileno.

Deliciosa, en las tres salidas de este noche, lo hizo magnífico. No hay problema, bien acompañada por un virtuoso Alvaro Zavala en gitarra, un Contrabajo de campeonato y una estupenda batería.

Buen jazz, buena ejecución y sobretodo buena onda. Temas clásicos y otros de Zavala, hicieron la noche muy disfrutable, para la gran cantidad de público que llegamos al club El Perseguidor.

El jazz sigue teniendo opciones, mientras existan intérpretes tan potentes

La vida de los otros : gran emoción

Esta película comienza alimentando nuestro odio natural por esos sicarios de las dictaduras, en este caso, un funcionario de la policía secreta de la Alemania Socialista. Una clase completa de tortura disfrazada de convicciones de nobleza y nacionalidad. Un tipo que oculta algo, tras 40 horas ininterrumpidas de interrogatorio se doblega y da los nombres de otros "culpables". Todo esto enseñado a un grupo de alumnos como evidencia científica.

Lo interesante de esta película es que un duro funcionario de la Stasi de la RDA viaja progresiva e involuntariamente por el camino de su redención, ya que mientras vigila y elucubra acerca de las actividades subversivas de un escritor y su pareja actriz, se humaniza, llora y toma contacto con su capacidad de emocionar. Todo eso es determinante para llegar al final

Quién es bueno o malo?, a veces solo representamos un papel en la comedia de la realidad.

No quiero contar la película, pero quiero recomendarla mucho, me llegó, me violentó, me hizo llorar y eso es mucho.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Zanzíbar : diversidad y belleza

Hace mucho tiempo que estaba incluyendo en mi lista de lugares que quería disfrutar, al restorán Zanzibar. Ubicado en el corazón de Borderío, desde la puerta de entrada se nota la fusión total de estilos. Cerámicas recortadas en el piso con lindas formas y colores, muchos tules y lámparas hermosas distribuidas por todas partes, mucha originalidad y buen gusto. Mezcla de restorán, lounge y carpa de algún jeque. Mozas y mozos de riguroso lino blanco y una rica música chillout y ambient de fondo.

Llegamos cerca de los 20 horas y nos instalamos en la terraza, un poco pequeña, pero muy bien armada bajo una carpa preciosa. La carta fue una sorpresa, 18 países representados en platos divinos, delicada selección y presentación. La carta de tragos, toda una sorpresa, pocas veces encuentro una selección tan variada de ron, coñac y champañas además de una fina selección de vinos, pese a la rigurosa multiplicación por 2 de los precios de mercado. Estupenda oferta.

Como no había apetito de cena, las selecciones para picar fueron la tentación y resultó un acierto. Una triada de sabores en cada una de las dos selecciones disponibles. Las delicias del oriente fueron mis preferidas, hummus marroquí, pasta de berengenas (babaganush sirio), unos cortes de pepinos con una salsa al yoghurt y menta extraordinaria. Sabores por doquier, todos acompañables con pan pita. La otra triada tenía pinchos de ave y carnes adobadas con elegancia, unas ricas empanaditas y salsas. Más estándar, pero igualmente exquisito.

Zanzíbar, un lugar que hay que conocer y gozar.

MIM : una inesperada experiencia

Como a veces me pasa, cuando recibí la invitación a este evento en El Mirador no pensé que se tratara de una celebración, hasta creí que haríamos una acción solidaria a la que adherí naturalmente. Sin embargo, se trataba de algo mucho más interesante de lo que pensé.

Siempre quise conocer este lugar y su lejanía lo había desplazado en mis prioridades. Pero llegar al lugar y sentirme encantado como niño, fue instantáneo. Me di maña para disfrutar la representación 3D de la evolución (un documental magnífico y entretenido) y luego recorrer uno a uno los pabellones con muestras prácticas del saber humano, de la ciencia y de las sorprendentes cualidades de los fenómenos de la naturaleza. Extraordinario fue jugar con burbujas de aire en una solución de silicona, experimentar y marearme con el centro de masas y la conservación del momentum, tocar por largo rato un piano, jugar con la electricidad y el magnetismo, divertirme por media hora con las imagenes recortadas por un muestreo estroboscópico, deformarme en espejos diversos e incluso acostarme en una cama de clavos. Gran experiencia, apropiada para cualquier edad mientras la mente siga siendo capaz de admirarse y disfrutar los pequeños detalles que a menudo pasan desapercibidos en esta loca y vertiginosa vida "moderna".

Recomiendo con todo mi corazón de niño sorprendido visitar el MIM, no se arrepentirán.

martes, 4 de diciembre de 2007

Baco : vino y bistró

Cuando comienza el periodo estival, nada es más placentero que la terraza de un buen restorán. Baco, posee una terraza excepcional, amplia, fresca y ambientada con buen gusto. Debo reconocer que lo mejor del lugar es la carta de vinos, de lo más variopinta y bien seleccionada.

El detalle de una temprana botella de agua helada marcando el comienzo del deleite, nos anima a preparar nuestras bocas para lo mejor. Unos aperitivos sabrosamente conversados y de ahí a los platos de fondo. Un buen día para carnes a la francesa, un filete a la pimienta abundante con un precioso pastel de papas a la crema y para mí, un medallón de filete a las finas hierbas (el plato de la casa y cuya salsa es secreto de estado) acompañado con unas impresionantes papas francesas. El vino, infaltable, clamaba desde la carta, un ejemplar de mixturas tintas y origen orgánico, Coyam del 2004, preciso y complejo, a pesar de no ser un vino de campeonato. Para los postres, celestinos y crema de chocolate.

Platos de tamaño adecuado, buen servicio (aunque les deben enseñar a las chicas como servir bien un vino) y un precio muy razonable.

Baco, sigue siendo un buen lugar para disfrutar un grato momento.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Bert Hellinger : constelaciones familiares

Debo reconocer que para entender esto, hay que aceptar que hay cosas que ocurren porque si, mágicamente sin mayor explicación. Hellinger, creador del método, no abunda en explicaciones, es un mago y consigue resultados increíbles. He leído un libro de entrevistas a Hellinger, llamado Reconocer lo que es, y me he sorprendido mucho.

Puesto en sencillo, muchos problemas de algún miembro de una familia, se pueden explicar por el devenir de otros miembros de la familia (a veces desconocidos, incluso muertos). Si se hace justicia con el antepasado por ejemplo, se resuelven los conflictos del resto. Hay una suerte de memoria o consciencia del grupo (algo así como los campos morfogenéticos de Shelfrake) que explica ese algo que forma parte de una familia involucrando a todos los antepasados y a todos los descendientes. Una enfermedad puede ser una forma de expiar un problema de otro, así aparecen dinámicas curiosas, tales como "te sigo a la muerte, a la enfermedad o a tu destino", o bien, "prefiero morir yo antes que tú" o "prefiero marcharme yo antes que tú".

El método de Hellinger, consiste en poner a todos los miembros de la familia en correspondencia física usando a terceras personas que "aceptan el papel" (no saben nada de nada, pero se constituyen en los canales). Una vez que se consigue el equilibrio del grupo (ahí comienza la magia), la constelación entera se corrige, independientemente donde estén los miembros verdaderos de la familia. Increíble no?

Se restablece el orden a partir de la reconciliación y la justicia interna del grupo y se compensa misteriosamente el sistema. Una sentencia poderosa de Hellinger es "quién actúa en concordancia, aunque vaya en contra de lo que otros digan, tiene la seguridad de ser bueno y realizar su condición de ser humano". O esta otra, "el desarrollo del ser humano va siempre de la mano de la culpa". Finalmente me quedo con ésta "la familia causa enfermedades, no porque las personas sean malas, sino porque en la familia actúan destinos que implican, afectan e influyen en todos".

Un par de películas disfrutables

Precedida por comentarios de Quentin Tarantino, llegó a mis manos Election, una película asiática de mafia y sociedad. En resumen, una triada (grupo mafioso) se enfrenta a la elección de su líder para los siguientes dos años. Ocasión propicia para descubrir los códigos éticos y morales de los miembros de la sociedad. Los votos se compran lisa y llanamente, pero hay algunos personajes que observan algunas reglas de la tradición (es un partido político como cualquier otro). De gran violencia, a medida que avanza la trama, los malos se ponen más malos y uno que aparenta ser un poco menos malo (se había ganado mi simpatía), con el poder ya obtenido, se transforma en una bestia despiadada. Fuerte la película y ni tanta ficción. De paso, les comento que ya existe Election 2.


Ratatouille, aunque suene muy loco, la encontré una película de una ternura increíble. Más allá de los personajes creados por computadora y las animaciones 3D, casi no puedo creer la maravilla que destila esa pequeña rata con un sueño de ser chef. Me la juego por la metáfora universal acerca de la capacidad real de hacer lo que queramos ser, siempre que amemos profundamente lo que hacemos. El talento está disponible en cada ser, incluso aquellos seres que imaginamos impensantes, hay una voluntad de ser en un flor de aromas y belleza especial, en cada ser vivo bulle una voluntad y puede ser un aporte al universo. Más allá de la ficción de la entretenida historia, hay mensajes potentes y notables. Definitivamente, esta película la rescato para mis favoritas. Divertida, soñadora, tierna y demasiado humana (en fin, lo bueno que quede en la humanidad), me encantó.

Ah!, seguro que los niños, la comprenden mejor que los adultos.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Richard Bona & band

Pocas veces voy al Centro Montecarmelo, pero siempre es por un buen filete. Esta vez acudí a ver al bajista camerunés Richard Bona, acompañado por un baterista, un percusionista colombiano increible, un guitarista, un trompetista de competición y un buen tecladista.

Una sesión deliciosa, llena de magia y sonidos. Bona tiene una voz que es un prodigioso instrumento, me provoca recuerdos de sus dúos con Bobby Mc Ferrin, maravillosos. En esta santiaguina ocasión, sabe encantar al público, hace vibrar a todos con percusionados ritmos que en el extremo se asemejan a cumbias, sin olvidar mantener la distancia, para que se deleite su arte.

El colombiano percusionista nos da una sesión exquisita de ritmos, mientras Bona recupera su voz, muy sincronizado interludio, ya aparece otra vez y nos maravilla con su show.

Dos horas de exquisita música, con la simpatía y talento de Richard Bona.

La fuente de la vida :gran película

Una película del mismo director de Pi, complejo e interesante como siempre. Aronofsky me da una sorpresa en este caso. Me desnuda el corazón y me hace cómplice de su historia. Acaso alguien se negaría a hacer todo, más que todo, por la persona que ama. Yo por lo menos, daría mi vida por quien amo y no me arrepiento de decirlo. Llegó a mis manos bien recomendada.

El director juega con arquetipos, juega con nuestra capacidad de sentir y me gusta. La búsqueda de la vida eterna, al menos, de la sobrevida de quien amas y que sufre una enfermedad incurable. La pélícula acude a varios planos, el presente formado por un médico-investigador y su mujer enferma, el viajero cósmico atrapando verdades trascendentes y el conquistador español. Bonito contrapunto, vertiginosos sentimientos, es una provocación que me saca lagrimas y sin embargo, me hace pensar en los límites del ser humano. Finalmente, ella muere, a pesar de sus esfuerzos, no puede hacer nada al respecto. Un gran golpe al ego.

Una gran película, nos muestra lo mejor del ser humano y nos provoca acerca de los límites de la vida.

sábado, 1 de diciembre de 2007

El Corazón del Hombre : Erich Fromm

A pesar que más que disfrute viví emociones encontradas. Pese a que no acierto por completo a comprender este texto de Fromm, lo concreto es que nació mi necesidad de leer el libro a partir de una interesante y por cierto disfrutable, conversación con un amigo con quien me gusta divagar en pensamientos acerca del ser humano y la búsqueda de sentido en este mundo.

Este es un libro que incursiona en la potencia del ser humano para el bien o el mal, acerca de la orientación hacia amar la vida (biofilia) o la muerte (necrofilia) y finalmente, si el ser humano es lobo o cordero.

Hace más de una semana que concluí el libro, pero no me atrevía a resumir la experiencia. Es perturbador saber que tenemos capacidad infinita en ambas direcciones, bondad o maldad. Lo que es bueno en cierto grado, si se exagera, puede ser malo y viceversa.

Así el narcisismo en cierto nivel es indispensable para sobrevivir, pero llevado a otro extremo puede convertirte en un monstruo incapaz de ver el mundo sino solo en las construcciones internas e irreales de tu mente enferma. Existe una capacidad innata en el ser humano de destruir y de practicar la violencia y todo ello pone en cuestionamiento la verdadera naturaleza del hombre, del ser humano.

Bajo cuales circunstancias amamos la vida y cuando estamos dispuestos a destruirla si es nuestra mejor opción?

En todo caso, celebro que alguien que puede escribir acerca de nuestra capacidad de amar (El Arte de Amar) puede adentrarse en los laberintos oscuros de nuestra alma para descubrir que en nosotros, vive todo, lo bueno y lo malo y al final, es solo un asunto de niveles y matices.

Filete perturbador!!

jueves, 29 de noviembre de 2007

The Rite of the Strings

Una noche de música en vivo y ejecutada por verdaderos maestros es un placer que no me gusta perder.

Jean Luc Ponty, Al Di Meola y Stanley Clarke juntos en el mismo escenario entregando su arte y simpatía a un Teatro Caupolicán bastante lleno. Un espectáculo que bien merecía el Palco que elegí y un escenario extremadamente austero. Estaba claro, que lo importante eran los músicos.

Con 15 minutos de retraso, bastante pifiado, partió rapidamente la música, los tres con una sencillez y humildad propia de los maestros, repasaron temas del jazz moderno y piezas notables de Ponty. Haciendo gala de sus extraordinarias ejecuciones, respetuosamente se pasaban el turno de instrumento principal y completaban a trio.

Seguidamente, Jean Luc Ponty tuvo todo el escenario para él, retirándose en ovación para dar paso al alegre y simpático Clarke, quien toca el contrabajo como si fuera una guitarra, al punto que se atrevió a tocar algunos acordes de rock, virtuoso y con poderosas manos. Dedicó un hermoso tema a su suegro, Antonio Prieto presente en la sala, lo que le valió un gran aplauso. Luego, dejó a Di Meola y su increíble guitarra. Realmente un guitarrista de lujo. Tras un par de temas deliciosos, volvieron a salir todos para un remate excepcional. Una breve retirada ya que nadie se movió de sus asientos sin parar de aplaudir y un bis con un gran tema, cerró más de dos horas de un espectáculo extraordinario.

Maestros!!!!!!

martes, 27 de noviembre de 2007

Puerto Varas : un lugar disfrutable a pesar de la pega

Lunes, un día algo nublado, pero de intensa actividad. Al almuerzo, el primer contacto con algo exquisito, tras una larga mañana de trabajo. Ya cerca de las 18 horas nos trasladamos hacia el lago Llanquihue para ponernos salvavidas y viajar en bote a un barco de agua dulce. Se trata del Capitán Haase, una mezcla de carabela, yate a vela y en realidad una suerte de lounge acuático. Fantástico, un paseo por el enorme y precioso lago, acompañado de unas copas de vino (pisco sour y jugos para el que quisiera) y quiches, empanadas y otras pequeñas delicias. Buena música y un paseo extraordinario hasta el atardecer.

Pero el disfrute solo comenzaba, ya que media hora después estabamos a bordo de un bus para ir a un restorán notable, el IBIS en la costanera. Elegante, un ambiente selecto y sobretodo bien atendido, lo cual es una excepción. El servicio, descubriría, no es una gran fortaleza en la zona.

Por la noche, mucho más tarde, una visita al casino de la ciudad. Como no me gusta jugar, concentré mi atención en una mesa en que había un mago increíble. Mostró una y otra vez sus trucos con las cartas, sorprendentes, variados y divertidos. Me reí largo rato como un niño ante una maravilla inexplicable.

Martes, jornada profunda de trabajo. Por suerte, nuevamente llegamos al almuerzo, no podía ser mejor. Una verdadera poesía para los sentidos. Partimos con una entrada de centolla magallánica servida en gazpacho perfumado al merquén. El plato central fueron unas Chuletas y trozo de pierna de cordero lechón a las hierbas con salsa de Carmenere, acompañado con una dariole (puré) de papas y aceitunas con fondos de alcachofa salteados. Amenizado con una copa de sabroso cabernet sauvignon y cerrando con un postre Tiramisú con frutillas glaseadas en caramelo balsámico y hojuelas de almendras. Delicioso!!!.

Ya concluido el trabajo, salí a caminar para despedir este paraíso del sur y aprovechar algo el luminoso día que comenzaba a desvanecerse. Terminé la despedida sirviéndome una cerveza artesanal de la ciudad (Colonos, gran bouquet, buen cuerpo y un toque de amargor) y un pastel increible de frambuesas y arándanos en el Café Danés.

Buen viaje, el sur la lleva!!!!

lunes, 26 de noviembre de 2007

Meliá Patagonia

Estar en un hotel como éste es notable. Una vista al lago envidiable y con una luna llena que empalidecería al sol. Ahora solo quiero comentar la delicia de cena que pude degustar.

Una entrada de tártaro de ostiones sobre un carpaccio de trucha marinada al cilantro, exquisita. Solo había que agregar algo de limón y pimienta y quedó perfecta. Un Chardonay Doña Dominga muy helado completó el placer de este primer plato.

Seguidamente, un filete de mero dorado en aceite de oliva con salsa de naranjas al estragón y un pastel de mil hojas de verdura, se transformó en un plato de fondo extasiante. De verdad, que la salsa de naranjas fue un detalle irrepetible.

El postre, un dúo de chocolate blanco y negro en salsa de frambuesa, estuvo magnífico. Unos sorbos de un cabernet sauvignon le proporcionaron el toque notable. Después solo quedaba tomar un buen café amargo.

Que gran cena!!!

domingo, 25 de noviembre de 2007

Puerto Varas : naturaleza y placer

Desperté muy temprano para preparar maleta, desayunar y ordenar todo para desaparecer por un par de días de Santiasco. Alrededor de las 14 horas ya nos encontrábamos en Puerto Montt y nos esperó un transfer para ir directos al destino final.

Logré convencer a un amigo para que me acompañara a comer a un lugar que recordaba, el restoran La Olla ubicado en la costanera enfrente al lago. Sabia elección, debido a la hora (más cerca de las 16 horas) tras la caminata desde el hotel, encontramos espacio para disfrutar unos platos sencillos pero deliciosos. Una corvina a la plancha con un techo de alcaparras al aceite de olivas y unas papas mayo (soy adicto a las papas), acompañado con un buen carmenere 2004.

Al regreso, aproveché de empujar a mi partner a algunas aventuras, estuvimos en un pequeño museo de un pintor de la zona (Pablo Fierro), donde la gracia es que mezcla sus buenos dibujos y pinturas de la arquitectura de la región, con piezas de madera, antiguedades y artefactos obtenidos en las demoliciones de esas mismas casonas de antaño. Muy notable y diverso, además de entretenido el artista.

Pasamos también por el Emporio del Lago que al final resultó ser una boutique de delicatessen. Probé una pasta de aceitunas y nuez que estaba muy rica.

Regresamos al hotel y mi compadre se murió, es decir, decidió dormir. Acto seguido yo salí a recorrer la ciudad. Entre lo rescatable, una muestra de esculturas en una carpa montada en la plaza de la ciudad en donde habían algunas piezas en piedra y madera excepcionales. También visité unos cafecitos, una feria artesanal de minusválidos y finalmente me instalé en la costanera frente al lago y al volcán Osorno y el Calbuco, a leer y esperar el atardecer. Precioso día.

CRUDO : un poco desordenado

Una noche de lanzamiento de disco. Jazz del bueno en manos de los hermanos Rodriguez (Mauricio en la guitarra y Daniel en batería) acompañados de Rodrigo Galarce en el contrabajo. En realidad, también acompañados por la deliciosa voz de Consuelo Schuster y Luis Pino (DJ) en piano.

Muy desordenada presentación, una suerte de apología al genio creativo y divertido de los músicos. Algunos errores técnicos, que por cierto, no opacaron el deleite. Consuelo, menudita, supo imponer su profesionalismo y buena voz entre las intrincadas combinaciones de sonidos y cables que los hermanos Rodriguez tenían sobre el escenario. Lindos temas y buenas ejecuciones.

La tocata fue potente, con uso de bases electrónicas que ayudaron a formar un sonido único y lleno de vida.

Cabe destacar que la fecha coincide con el cumpleaños de Mauricio Rodriguez y teniendo el disco que se lanza por nombre Crudo, recibí de regalo un plato de crudo excepcional. Delicioso.

Al final, salí con dos discos que compré y un nuevo préstamo de Erwin bajo mis brazos. vale la pena ir al Thelonious.

sábado, 24 de noviembre de 2007

El Secreto : ya lo conoces

Mientras almorzaba hoy, estuve viendo esta película, que por sobre todas las cosas, es un viaje por las opiniones de diversos personajes que se vanaglorian de haber conseguido todo lo que querían, aprovechando el secreto.

Este secreto lo conocen todos y está en muchas formas presente en nuestras vidas. Cuando te dicen, piensa positivo, canaliza tus energías hacia lo que quieres, focalizate en lo que quieres conseguir o simplemente ten fe. Todas son expresiones de lo mismo. Nuestra mente bien dirigida es capaz de conseguir lo que queremos. Sin embargo, demasiadas veces en esta película se plantea el conseguir dinero, la pareja ideal, la casa soñada, en fin, ambiciones muy humanas, pero que banalizan la importancia de la capacidad del ser humano.

El secreto es un interesante documental acerca de lo poderosa que es la mente humana y como es posible vivir una mejor vida. Alguna vez leí que nuestro modelo de mundo determina ser perfectamente felíz o infelíz, eso es justamente lo que hacemos a diario. Si pensamos que hoy es un mal día, con seguridad, pasarán muchos problemas y lo será. No obstante, si tenemos una mirada optimista, disfrutamos lo que nos ocurre y usamos nuestra energía en vivir mejor, verdaderamente ocurre.

Fue un almuerzo nutritivo y pese a los aspectos en extremo materialistas de algunas opiniones o ciertas trivialidades, disfrute también el documental.

viernes, 23 de noviembre de 2007

Entrama en Sala SCD

A pesar que es un grupo con 10 años de trayectoria, Entrama sigue teniendo muchos adeptos. Un grupo de fusión latina, a veces sinfónico, pero por sobretodo, un grupo de talentosos músicos.

Se presentaron en el ciclo de tocatas en vivo de la SCD Bellavista y vaya que fue disfrutable. Partió con retraso, pero esto se perdona a un grupo de este nivel, tocaron piezas bien seleccionadas de su abundante repertorio.

Algunas modificaciones llamaron mi atención, faltó el violoncello (lo que siempre le dió el toque especial a la música) pero apareció un hermoso piano, en el que se turnaron dos de los músicos. Da gusto ver la habilidad para manejar distintos y multiples instrumentos y ser buenos en su ejecución.

Como siempre, el notable y gracioso Carlos Basilio, mantuvo el humor y la buena onda de todos en la sesión. Grande Entrama!!!!

jueves, 22 de noviembre de 2007

Quinte55ence en M100

A pesar de ser miércoles y que mucha gente prefirió el futbol, para mi era una cita imperdible con el talento y la buena música.

Pasadas las 21 horas, en un austero escenario pero repleto de la mayor concentración de músicos jóvenes y brillantes que se puede tener, se dió inicio a una maravillosa tocata de jazz. Temas del único disco de la banda, más temas que dejaron fuera de esa placa y los sorpresivos y notables temas que prepararon para homenajear los 90 años de Violeta Parra, nos hicieron delirar de placer.

La banda, formada hacia el 2005 al alero de mi sitio preferido, Thelonious, tiene por lider natural al virtuoso Federico Dannemann (guitarra); una segunda guitarra en manos del notable músico Roberto Dañobeitía; el contrabajo con un inspirado Rodrigo Galarce quien esta vez también tocó bajo eléctrico; la batería con el maestro Daniel Rodriguez quien reemplazó a Félix Lecaros; el increíble Lautaro Quevedo en teclados (habría sido más genial aún si hubiesen montado un piano); Sebastián Jordán en trompeta, increíble como siempre; Marcelo Maldonado quien es lo mejor que visto haciendo jazz con trombón; Jaime Navarrete, una segunda y sorprendente trompeta; Agustín Moya con saxo tenor, maestrísimo; Andrés Pérez con clarinete y saxo tenor; Cristián Gallardo en saxo alto y flauta (Pérez y Gallardo son parte de otro grupo excepcional, Contracuarteto, recientemente presentes en el primer festival de jazz de La Pincoya que tal?); el genial e introvertido Diego Manusevich en clarinete bajo. Todos dirigidos por Francisco Nuñez, mentor del grupo.

Las piezas dedicadas a Violeta Parra contaron con la extraordinaria voz de Francesca Ancarola, exquisita interpretación y buena onda. Ah, casi olvidaba la increíble pieza que compuso y dirigió Martin Joseph, un músico inglés a quien tuve el gusto de conocer en otras tocatas y que hace algo increíble, es profesor y director de improvisación (dialéctico no?).

Maravillosa tocata.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

Le jour se leve

Título original que se puede traducir como Amanece (el día se levanta), es el nombre de una vieja película francesa (1939) del director Marcel Carne. Un afortunado préstamo filete la dejó en mis manos y naturalmente no resistí poder verla. Con los pocos recursos de la época, en blanco y negro, con muchos defectos técnicos, la película me atrapó.

En resumen (porque es mejor verla), un tipo sencillo, honesto y buena persona asesina a otro individuo en su cuarto y luego se refugia en su soledad y mientras la policía trata de reducirlo (matarlo) él recuerda como llegó a convertirse en un asesino. Es un film triste, siempre esperanzado en el amor y de profunda crítica social, notable y sobretodo recomendable.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Mirador Cerro La Cruz en Parque Mahuida

Levantarse un domingo a las 6:45 horas es un gran desafío para mí, pero no me iba a perder la oportunidad de ir a un trekking con los malayos (http://www.malayos.cl/), varios de los cuales conocí en el paseo a los glaciares de El Morado la pasada semana.

A las 8:00 ya estabamos en el Parque Mahuida en La Reina, un clima algo fresco, pero que a todo evento, se convertiría en un infierno caluroso. La gran mayoría llegó en la banda de tiempo definida (se espera solo 10 minutos) y un llamado desesperado de alguien nos aguantó en una espera de 5 minutos adicionales.

Comenzamos el ascenso rápidamente, mientras el sol se asomaba en la cima de los cerros. Si todo iba bien, podríamos evitar que nos diera en la cara. Sin embargo, fue una subida comepiernas muy dura y ya transcurrida una hora de trepar la pendiente, me estaba doliendo una rodilla (ahi descubrí una vez más que los años no pasan en vano). Como sea, llegamos al destino en unas dos horas y poco a poco fueron llegando casi todos los integrantes (salvo un par de deserciones).

Ya instalados (algunos) a la sombra del único árbol del lugar (el resto son solo arbustos) comenzó la mejor parte del paseo. La faceta oculta y deliciosa de los malayos es que son buenos gourmets, unos sibaritas con mochila!!!!!!.

Comenzaron a aparecer aceitunas al ajo, turrones de leche, crujientes de pan atomatados y un sinnúmero de delicias. Lo que puso la nota alta, fue cuando una chica sacó unas frutillas enormes y heladitas más un pote de crema, con lo cual tuvimos un postre delicioso. La misma crema sirvió para que algunos probaran un capuchino, ya que también había café, y del bueno.

Impresionante, con un estímulo así de potente a mis sentidos, no quiero hacer otra cosa que no sea , salir con los malayos. Me encargaré de llevar algo delicioso en el próximo paseo, para aportar al disfrute

sábado, 17 de noviembre de 2007

Fractal Sinfónico

Hace tres semanas que compré las entradas para ir a ver este espectáculo en el Teatro Oriente. Mi motivación la encontré en el sitio web del grupo Fractal (http://www.fractal.cl/) y en la sospecha que mi intuición me provee.

Llegamos 20 minutos adelantados y ya estaba lleno. (me cargan los espectáculos sin numeración, ya que impera la ley de la selva). Como sea me ubiqué en lo mejor que conseguí (igual bien) y esperé el inicio de algo que prometía. Un escenario lleno de instrumentos, convencionales y otros rarísimos. Lleno, demasiado lleno.

Cabe destacar que este grupo ya tiene 3 CD a su haber y en esta ocasión lanzaban un DVD, todo un evento por cierto.

Con breve retraso, se larga el espectáculo. Una muchachada (chicas y chicos muy jóvenes) se arman en una orquesta magnífica con violines, violoncellos, contrabajos e instrumentos de viento, bajo la dirección de un notable José Luis Dominguez). Una orquesta increíble para acompañar a los maestros del grupo. Son tantos que se estorban e incluso colisionan con focos y cables.

Uno de los músicos podría ser un clon de Ian Anderson de Jethro Tull, alto, pelao (con colita) y maestrísimo con el violín eléctrico, tres músicos notables a cargo de las percusiones, el vocalista principal empoderado en los teclados, un guitarrista y un músico increíble a cargo de todos los instrumentos de viento.

Por momentos creí estar en un concierto de Dead Can Dance o quizás de Entrama, pero extendido, pluriforme, expandido y total. Exquisita música, un contrapunto entre lo étnico y lo sinfónico, entre lo latino y lo clásico. Inclasificables.

Pero lo mejor estaba por venir, ya que acorde a la pretensión de ser una fiesta de lanzamiento, cada tema fue acompañado con un invitado de primera. Así desfilaron Pedro Villagra, una cantante de flamenco (increíble voz y potencia), un bajista de bajo perfil y excelente ejecución, un paisano que tocaba un extraño instrumento de cuerdas, una voz voz femenina exquisita, cuyo nombre no atrapé y hasta un clásico de clásicos, Joe Vasconcellos.

Virtuosismo a toda prueba, ya que los músicos de Fractal iban paseándose por distintos instrumentos con una facilidad que deja boquiabierto a cualquiera.

Fue un espectáculo redondito, placentero como pocos, con música extasiante, palmeable y hasta bailable, de puro gusto.

Excelente noche de sábado.

MNBA y las fotos de Frank

En el tiempo he tenido la fortuna de haber visto todas las exposiciones fotográficas de los notables que el museo ha expuesto. Me refiero a Doisneau, Cartier - Bresson, Erwitt y ahora a Robert Frank, todos maestros de la fotografía.

En la planta subterránea del museo, se llenó de sus fotografías en blanco y negro, tomas desde los años 40 hasta fines de los 70, que muestran su innovadora evolución. Fotos de la soledad con personajes anónimos y casi siempre serios o tristes, fotos misteriosas, fotos intervenidas, hasta textos insertados en la imagen.


Robert Frank sabe jugar con el lenguaje visual, con sutileza y usando todos los recursos técnicos de su época (nada de photoshop y manejo digital). Sin duda, una gran exposición.


De paso, recorrí otra sala con el homenaje a Picasso, una gran cantidad de artistas que usando las claves de la obra del pintor español, lo homenajean pictóricamente. Interesante y algunas de las obras, verdaderamente buenas.

Thelonious adictus

Creo que ya opero por adicción, todos los fines de semana acudo gustoso a este lugar de jazz, el Thelonious. En esta ocasión presuroso por escuchar la combinación de Claudio Rubio en Saxo, Andy Baeza, siempre notable en batería, Mauricio Rodriguez en guitarra, Rodrigo Dañobeitia en la otra guitarra, Sebastián Peña en el Contrabajo (todo un descubrimiento para mí) y un invitado inesperado Felipe Riveros en piano para el último y más notable tema de la tocata.

Llegué tarde pues la tocata estaba apuntada a las 23 horas, sin embargo, a esa hora pocos comensales, algunos ensayos individuales y mi encuentro con un buen ron. Cuarenta minutos después, la belleza y el placer de la buena música llenaron el local.

Una buena hora de temas largos, intensos y llenos de la pasión habitual del buen jazz. Noté un detalle interesante, los músicos tienen muy diversos gustos. Claudio Rubio gusta de tomar cerveza y fumar un cigarrillo entre los temas, el resto se inclina por un buen cuba libre o el pisco sour.

En mis cavilaciones me encontraba cuando el hambre me sorprende pidiendo una porción de aceitunas y queso de cabra, con aceite de olivas y orégano. Exquisito entremes par amenizar mi trago.

Tras el intermedio, otra hora de temas deliciosos, me transportan por las posibilidades del talento musical de estos muchachos. Lindo espectáculo y especialmente con la intervención de los acordes de piano, que como siempre o casi siempre, dan el toque mágico al conjunto.

Me despedí de Erwin devolviendo los 2 CD de Thelonious Monk que me había prestado y orgulloso y salí a casa con Pithecanthropus Erectus de Charlie Mingus, con una gran sonrisa en mi cara.

Así vale la pena cerrar una semana.

Ballet y pelos en punta

A las 19:30 del viernes 16/11 tenía una cita ineludible con el filete. Teatro de mi querida Universidad de Chile y el Ballet Nacional Chileno, una promesa de disfrute. Con algún retraso, perdonable por cierto, se abre la sesión con premios para ya premiados bailarines de ese cuerpo de baile. (a veces es tarde reconocer lo bueno en alguien, como si se esperara copiar las inclinaciones de otros). Rector incluido, aplaudimos a notables y sus merecidos premios.

Se abren las pesadas cortinas y un tercio del escenario está lleno de músicos y sus instrumentos, al fondo se observa a los bailarines y sube, micrófono en mano, el director del ballet Gigi Caciuleanu a realizar una introducción. Nos habla del movimiento y de las posiciones de los instrumentos (horizontales como los violines, verticales como los contrabajos, la diagonal de los violoncellos) y comienza el espectáculo.

Preciso, moderno, altamente sincronizado y bello. Cada bailarín efectuó una y otra vez las posiciones de los instrumentos mientras volaba la música de la orquesta. Movimientos individuales y grupales, todo fue movimiento. Me encantó la sonrisa en las caras de algunas bailarinas, quienes a pesar del esfuerzo físico, disfrutaban tanto lo que hacían. Un muy buen nombre para lo obrado : Movimientos.

Un intermedio, para cambiar los instrumentos al foso y dejar tiempo de descanso a los bailarines. Ahora aparecen las voces, la Camerata vocal de la U.

Cuando comienzan a cantar la primera composición, solo voces, se me erizan los pelos, es increíble. Solo dos bailarines en escena, luego dos más y finalmente aparecen todos, al son de esa música divina. Sobrecogedor y bellísimo. Sin pausa, se larga la segunda composición y el baile es un contínuo, con bailarines que están con otros y luego son solistas, combinándose una y otra vez. Maravilloso, quiero decir Magnificat

Sibaritas para sibaritas

Viernes. El día deseado por todos, el día de hacer algo delicioso que cierre una semana cargada de trabajo y poco disfrute. Reservé una mesa con vista ala pérgola para sentir la energía primaveral y disfrutar del clásico restoran Sibaritas. Muebles clásicos combinados con bonitos y modernos cuadros de pinturas, le dan un toque más informal al ambiente.

Pedimos un menú de degustación, una excelente forma de probar variados y ricos sabores; partimos con tres ensaladas muy elaboradas y sabrosas, los platos de fondo, una trucha rellena sobre un cerro de verduras cocidas, francamente delicioso y un filete delicadamente adobado acompañado con papas a la crema, maravilloso. Un vino reserva de Tabalí le dio el toque de excelencia. cerramos con un plato de tres postres, tres sabores más que anotar.

El servicio es de lo mejor que he podido probar. Ojalá muchos restoranes aprendieran lo que se juegan con los mozos, un buen servicio no solo se agradece sino que hace que la experiencia de placer se amplifique. Muy bien.

Me dará mucho gusto volver de vez en cuando a este rico restoran.

viernes, 16 de noviembre de 2007

lecturas accidentadas

Esta semana estuve "encarcelado" en un taller, igual potente y de gran aprendizaje para mí, pero sacando la cuenta, me pasé un miércoles hasta las 4 de la mañana y el jueves hasta casi las 10 de la noche recuperando el tiempo. Por suerte, tuve maña suficiente para aprovechar los breaks para concluir dos libros interesantes. El primero, una compilación de 100 poemas del gran Charles Bukowsky, oscuro poeta de la modernidad, capaz de escribir sucio y que suene a poema serio. También leí un libro de Pilar Sordo, ¡Viva la diferencia!, en que entrega claves para entender el mundo femenino (sobretodo) y el masculino. Me hizo mucho sentido el conjunto de diferencias psicológicas (capítulo 3) que descubre empíricamente y que en definitiva, nos comprueba lo valioso que existamos mujeres y hombres. La delicia de entender porque para una mujer no es tan importante el resultado sino el proceso y como nos jodemos la vida los hombres intentando cumplir el objetivo sin atender el proceso.

Buenos libros, entretenidos y nutritivos

domingo, 11 de noviembre de 2007

Pulso en Thelonious

Aunque bastante cansado este 10/11, no podía dejar de asistir a mi cita de jazz del sábado. Esta noche, La banda Pulso, cuatro músicos excepcionales, Vera en guitarra, Moya en Saxo, Baeza en batería y Quevedo en piano/teclados. Una cita con lo bueno, sin duda.

Mucha tardanza en la partida, pues Baeza se retrasó ( muy raro). También fue muy extraño que faltaran ingredientes esenciales para que me pudiera comer mi sandwich favorito, tuve que pedir otro (rico pero nunca tanto como mi preferido). Me quedé pensando si Erwin estaba pasando un mal momento. No lo sabré y espero que solo sea un instante.

Disfruté una gran tocata de esta banda, virtuosismo, gran sentido del ritmo y de la magia del jazz. Me sumé a los aplausos que espontáneamente brotaban de la asistencia tras los solos de instrumentos que nos hacían gozar a todos.

Redoblo mi admiración por Andy Baeza, quien llegó muy atrasado y en menos de dos minutos estaba tocando como si hubiese ensayado todo el día. Gran músico.

Me retiré temprano (bueno nunca tanto) con dos CD en mis manos. Erwin me prestó una deliciosa selección de Thelonious Monk envidiable. Gran compañero y muy generoso.

Glaciares a la vista

Este sábado 10, la cita obligada era con la naturaleza, lo más hermoso que nos regala la vida y que habitualmente no vemos. ¿cuántos saben que a menos de 100 Km de Santiago, hay paisajes milenarios, de una belleza impactante y que nos conectan a mucho más que un documental sobre lo mismo?. Es demasiado hermoso lo que tiene este país y quizás no sobreviva por mucho tiempo más.

Plaza Italia a las 7:45 de la madrugada, estaba solo. Afortunadamente comenzaron a llegar los comensales de este delicioso menú. Cerca de las 9 horas ya estaba todo el grupo, tanto del lugar en que trabajo como de amigos. Reconocí y saludé a un par de compañeros de aventura anteriores y cerca de las 8:10 llegó sorpresivamente mi buena amiga Elena, aparentemente la única en mi pega que le interesó la invitación que a todos hizo el Club de Montaña de la empresa. Llegaron los Malayos, muy entretenidos y con una mística envidiable, un club informal de montaña y en tres vehículos escolares, viajamos hacia el Cajón del Maipo.

Comenzó una caminata por una seca y pedregosa ruta, hasta que llegamos a la nieve del Valle Las Arenas. Ufff, vaya que cuesta caminar sobre la nieve, pero tanta belleza vale la pena. Tras casi tres horas de caminata, llegamos a la verdadera y congelada Laguna del Morado con una vista envidiable a los glaciares. Son cuatro glaciares que se pueden interpretar como restos de un mismo glaciar en proceso de desaparición. Me invadió una gran pena tomar contacto con el hecho que cada día que pasa, es menos lo que queda de esta maravilla de la naturaleza.

Almorzamos enfrente del glaciar y del colgante (lo que queda arrimado en la montaña) con una laguna en proceso de descongelamiento. Fue muy emotivo, los casi 30 comensales se esforzaron en compartir cada uno de los alimentos, es maravillosa la solidaridad del montañista, sabe que está con un hermano, alguien que ama lo mismo y que haría cualquier cosa por apoyarte e incluso salvarte si fuera necesario.

El retorno, estuvo matizado por los divertidos patinazos en la nieve y el temprano congelamiento que sufrí de mis manos, afortunadamente la flaca Elena me ayudó con sus guantes para que recuperara la sensación de mis dedos. Fue una muestra más que la montaña saca lo mejor de cada uno, pienso que seguro que hacía mucho frío para cualquiera, pero gracias a esos guantes recuperé los dedos. Gracias flaca, eres una buena amiga.

Una vez que llegamos a los vehículos, vino la parte menos grata, un viaje eterno hacia la ciudad, de verdad lo sentí demasiado largo, no obstante, después de las 21 horas ya me encontraba en mi terruño.

Exquisito paseo, me llené de energía y de paisajes increíbles. Debería ser asignatura obligada de toda persona que piensa que no hay nada más que conocer.

Creamfields 2007

Fiesta Electrónica, fiesta de las vibraciones de los sistemas de amplificación y la música electrónica. Este año, en el Movicenter (metáfora del movimiento, la automatización, el sistema de créditos o quizás, la rapidez).

Varias semanas antes compré las entradas para este espectáculo, invité a mi hermano y al final se acoplaron varios amigos y parientes. Me convertí en el comprador oficial ya que con una de mis tarjetas de crédito podía acceder a descuento. En fin, pasadas las 21 horas del viernes 9, comenzaron a llegar a mi departamento los comensales electrónicos. Tras una larga y nutrida charla como es de rigor, nos dividimos en dos grupos para calzar con los taxis. Llegamos cerca de las 23 horas, tras unos simpáticos incidentes, hasta el lugar del sonido. La verdad es que sonaba poco amplificado, esperaba más power y estaba un tanto fome.

Nos fuimos acomodando en el centro, tan cerca como era posible del escenario (nunca tanto, solo lo necesario para disfrutar la parte visual del cuento). Varias pruebas de sonido algo tardías, casi comencé a chorearme, pero bueno, llegó el momento y Chemical Brothers estaban en el escenario y el sonido comenzó a ser interesante. Poco a poco, se desarrolló el show, cada vez más intenso, mejorando la potencia sonora y la visual y al cabo de 20 minutos, estábamos todos embalados, disfrutando intensamente. Gran parte de los discos del pasado, también la última placa, aunque siempre me quedaré con la duda si tocaban en vivo o no, ya que sonaban demasiado igual a los discos "no en vivo". Como sea, fuera de las pendejas dando jugo (son insoportables), estuvo muy disfrutable y lo pasé bastante bien.

El recuerdo que me quedó del recital, fue mis zapatillas preferidas manchadas de un cuanto hay, ya que en el apelotonamiento, recibí pisotones, me derramaron bebidas, tragos, etc. Ya veré si se puede limpiar tanta huella.

Bien por Chemical Brothers, son muy buenos.

lecturas de la semana : lo que deja

Esta semana concluí con tres libros interesantes aunque más diversos de lo que se estila. Tengo la mala costumbre de leer varios libros en paralelo (no soy capaz de hacerlo de otra forma, es parte de mi falta de disciplina) y eso provoca cierta entropía en mis pensamientos y por añadidura en mis comentarios.

Quiero comentarles acerca del libro de un destacado sociólogo chileno, Tomás Moulian, aquel que escribió un libro delicioso Chile Actual : Anatomía de un Mito por allá por el 97. Un escritor aguerrido que dice lo que muchos pensamos y no nos atrevemos a decir. Pues bien, sigue haciendo lo mismo y vaya que lo hace bien. En esta monografía titulada "El consumo me consume", purga los demonios de la realidad y nos enfrenta al espejo de nuestros comportamientos, ¿cual es tu tipo de consumidor?. Buena pregunta, ni hedonista ni ascetico, me reconozco compulsivamente estoico, dispuesto a disfrutar de lo bueno sin muchas culpas, pero con un sentido bastante más trascendente que la visita al mall o la compra de "identidad" basada en marcas o en ostentación. Un buen libro, una deliciosa cena en un restorán notable, un gran vino o una visita a un museo son placeres de las que no puedo prescindir y Moulian sabe de que hablo. Por cierto, comparto además la crítica sobre las intenciones que subyacen tras la oferta crediticia y los procesos de control social, a veces me siento demasiado acompañado por Moulian en mis cavilaciones.

Leí también un libro acerca de algo menos terrenal pero ciertamente incidente en mi vida y quizás en la de otros. ¿hay otras formas de vida viviendo entre nosotros? ¿hay seres de luz que pueden ayudarnos o al menos aconsejarnos?, ¿podemos acceder a ellos?. Tema dificil en un mundo tan convencido que no existe nada más que lo que ve y siente. Bueno, yo creo que hay muchas cosas que no entendemos y que hay que investigar. Brian Weiss, autor de varios libros y uno bien conocido "Muchas Vidas, Muchos muertos", me acompañó algunas semanas con el libro Los Mensajes de los Sabios. Un libro inquietante y a pesar que soy un escéptico de vocación, hay muchos pasajes del libro que me hacen sentido. Más allá del narcisismo de Weiss (se cree iluminado), son demasiados los antecedentes que nos pueden hacer pensar que efectivamente la vida es un contínuo en el cual aprendemos (si queremos) y que eternamente (quizás) perfeccionamos nuestra alma. Tengo mis propias evidencias y postulo a que nuestra vida actual (con lo bueno y malo) tiene un sentido y que lo que debemos aprender no es gratis (puchas que cuesta).

Finalmente, también concluí con un extraño libro, un buen sociólogo aunque para mí más bien filósofo, Pierre Bourdieu. El libro es Las estructuras sociales de la economía, un ensayo, un experimento, a veces parece una reunión de trabajos de un curso de aventajados estudiantes, pero al fin, es contundente. Postula que la economía después de todo, es una construcción social, un constructo que nace en las intenciones del Estado y se perfecciona en los intereses de los grupos de poder. Hace un análisis notable de esa pretensión del ser humano de tener una casita, tener ese territorio personal desde donde proyectar su vida y su familia, como opera el Estado permitiendo o restringiendo, como los actores sociales participan en su provisión y bajo cuales condiciones. Un sistema completo de dominación construido para que cada ciudadano se suba al carro de las reglas de la sociedad y haga posible su propio nirvana de acuerdo a su capacidad de pago y de aceptación del sistema. Duro de asimilar, un libro contundente.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Tour de museos

Este domingo necesitaba un refresco visual, después de mi habitual visita en cleta al San Cristóbal y mis indeclinables y casi frustrantes 20 minutos de ascenso. (esta vez amenicé el descanso con una buena lectura sobre el eneagrama y jugo de huesillos, of curs)

Partí a almorzar al Liguria de Manuel Montt (por suerte en este día hay poca taquilla y menos ruido). Uno de mis platos preferidos (lasaña de espinacas y ricota) con un estupendo vino merlot Santa Ema Reserva, me dieron suficiente energía para emprender viaje a través de la canícula dominical (vaya día caluroso, no?).

Me fui a Quinta Normal con la esperanza de visitar al menos tres lugares filetitos. Llegué al MAC y justo le apunté a un cambio de exposición, estaban trabajando por lo que seguí mi camino. Apareció Matucana 100, siempre notable. Dos exposiciones interesantes, la primera, el resultado del Manifiesto de Santiago, muy loco y lo que más me entusiasmó fue un engendro tecnológico que escribía poemas. SI, de verdad los escribía y hasta me robé (supongo estaba previsto) un par de hojas con versos. Les transcribo uno de los 26 que tomé para la posteridad

epitelio no solo no vaginal
mas inoculada superación tumefacta
lo que la proliferación al sedante aún le niega
quiere crepuscular que a sus fosales guarde

jejeje, es notable (sorry).

Hice una corta travesía a la Biblioteca de Santiago, estaban casi cerrando (¡a las 17 horas!!!!), nada impactante y rapidamente me devolví a Plaza Italia. Sabía de la retrospectiva dedicada a Marta Colvin en Telefonica. Notable, una mujer entregada al arte al descubrimiento de las formas y de los materiales, me sentí motivado por sus búsquedas en las culturas primitivas de nuestra latinoamérica, siento que lo logró. No se la pierdan, vale el paseo

Mi pecado con Bourne

Fuerte declaración. Pero la trilogía que conforman las películas Identidad Desconocida, la Supremacía de Bourne y El Ultimatum de Bourne, me encanta.

Siendo películas de acción, logran entusiasmar con guiones bastante inteligentes, pocos errores y muchísima acción. Usan mucho los guiños a quienes han visto las otras películas, pues la trilogía es parte de una misma historia (ya saben El Señor de los Anillos, Harry Potter, La Guerra de las Galaxias, etc), pero esta es una película de un solo personaje potente y que después de todo solo quiere saber quien es (les suena conocido) y hay algo de venganza por un amor asesinado (también les suena metafóricamente conocido?)

Bueno, en gustos no hay nada escrito.

Día Noche Día Noche, noche, noche, noche

Esta película Day Night Day Night, me dejó muy impactado. Esperaba temerosamente el típico pasquín visual lleno de la retórica gringa vctimizada tras el 11/09 y su discurso del terrorismo, etc, etc

Encontré una película llena de detalles, de una atmósfera asfixiante por los pequeños espacios, por dialogos casi inexistentes, por misteriosas razones y largas esperas. De verdad, que esos ojos verdes de la muchacha son más decidores que lo que se explica y cada vez que ella agradece una orden, cada vez sentí más pena por el ser humano, por las decisiones que tomamos y por los dogmas que aceptamos.

Veanla, es muy interesante, lo cual no significa aceptar o estar de acuerdo

martes, 6 de noviembre de 2007

Claudio Rubio Cuarteto

Hace varias semanas que se presenta en el Thelonious, este notable cuarteto. Un saxofonista de primera (Claudio), una guitarra virtuosa, una estupenda batería y el inigualable contrabajo (Menares, Baeza y Galarce).

Este sábado 03/11 me dejé caer por el lugar, no solo por la música sino por mi sandwich preferido (Lomo de Vacuno completo, exquisito), un buen ron y para devolver a Erwin (dueño, maestro y poeta del lugar) un CD de jazz estupendo. Se trataba de Lee-Way (el notable Lee Morgan + grupo).

Gran tocata hasta bien entrada la noche, esta vez no hubo mucha audiencia, pero el espectáculo no arrugó en nada. Bien por los músicos virtuosos de este país.

Salí contento y con otro CD de miedo Miles & Quincy Live at Montreux, a disfrutarlo se ha dicho.

Feria del Libro

El primer viernes de noviembre decidí dar una vuelta por esta destacada feria nacional. Mi objetivo, evitar ir el fin de semana en que todos los chilenos van antes que cierre. Interesante muestra, ampliada significativamente. Igual me sorprendió la sensación plástica del lugar. A mi mente vinieron esas primeras ferias, algo así como el Teatro a Mil (que si costó mil al principio), era más artesanal, lleno de voluntades y ganas de mostrar que Chile era capaz de hacer cultura, aunque costara muchos esfuerzos.

Mucha novelita best seller, una fuerte presencia de editoriales asociadas a universidades y para mí, la gran sorpresa, mucho libro entretenido para niños. No me viene bien a esta edad, pero me entretienen harto. Compré y regalé uno que me gustó mucho.

Entre lo bueno, encontré un libro que se me había escabullido por años, El Corazón del Hombre de Erich Fromm, muy recomendable, a los que añadí, Una Nueva Tierra de Eckhart Tolle (el mismo de ese gran libro El Poder del Ahora, que es muy significativo en mis reflexiones) y una joyita del pasado, de Paulo Freire (el mismo) Pedagogía del Oprimido, infaltable en la biblioteca de la comprensión de la realidad.

Buen paseo, mala la comida. Esta Feria debe invertir en restoranes de mejor nivel.

Veremos el próximo año

lunes, 29 de octubre de 2007

Encontrando el límite

Este domingo tenía previsto estar en la montaña, pero el paseo se funó por falta de quorum. ¡chilenos flojos!.
Agarré mi cleta cerca de las 11 de la mañana decidido a ganarme, superar mi barrera de los 20 minutos ascendiendo el San Cristóbal.
Llegué como siempre, tras 7 minutos de viaje a la base en Pedro de Valdivia Norte. Unos ejercicios de elongación, algo de solución isotónica para mi maldita transpiración y allá vamos.

Partí con una relación de 1:7 pedaleando raudo hacia el jardín japonés. Llegué con relación 1:5 ya que me estaba cansando mucho. Los cigarrillos y el trasnoche se hacen notar en un cuerpo de 46 vividos años. En fin, es lo que hay.

Hasta aquí iba con más de un minuto de ventaja respecto de otras ascenciones. Me apliqué en llegar a Tupahue antes de los 10 minutos y lo logré con creces. Bien!!!!!, dos minutos valiosos ganados.

De ahí en adelante, era solo mantener el ritmo y lo lograría, de hecho, estoy seguro que nunca había hecho tan rápido la cuesta de los afligidos, pasé a 5 ciclistas que morían en ese trance. Casi exhausto, continué en relación 1:5 en lo que quedaba, 18 Km/hr se veía muy bueno, considerando que solo quedaban menos de 2 Km. para la cumbre. La verdad, muy cansado, pero pedaleando, pedaleando.

Llego a la cumbre y Oh! decepción, una vez más llegaba en 20 minutos. Joder!!!!, se supone que debí llegar en 18 a lo más 19 minutos, pero el fatídico 20 se marcaba claramente en el reloj.

Definitivamente, llegué a mi límite.

Acordes de piano

El sábado 27 fui a disfrutar una tocata de jazz al Thelonious. Fue ocasión de volver a ver al pianista argentino Ernesto Jodos junto a Sebastián Duplaquet Trío. Una delicia de temas, largos y sentidos, llenos del virtuosismo de estos connotados músicos, quienes disfrutan tanto como yo de la música que sale de sus almas.

Compré el disco de Jodos, promete, de verdad que tiene cuento el hombre. Conversé un rato con Duplaquet, quien con su acostumbrada modestia anuncia que viene un nuevo disco (varios temas los he estado escuchando estos últimos meses en diversas tocatas). Ciertamente, después del magnífico disco Sueños de Sebastián, el desafío de superarse a si mismo es grande.

El nunca bien ponderado compañero poeta Erwin (dueño del Thelonious) nuevamente me sorprende prestándome un nuevo CD. Grande!!!!

miércoles, 24 de octubre de 2007

pasan los días

Hace días que no tenía ganas de escribir. Bueno, haré un resumen de mis correrías. Museo de Bellas Artes, dos salas con fantásticas presentaciones, Balmes y Simonetti, muestran arte sinigual. En el MAC, los representantes de Corea sorprenden, realmente hay tantas formas del arte que es imposible cansarse de aprender y gozar.

Hoy fui por La Marraqueta, un gran grupo de Jazz, intenso, diverso y sobretodo original.

Así, me pongo agitadamente al día, saltando muchos aspectos, pero asegurando que sigo vivo, muy vivo y queriendo vivir más

visita a Puerto Montt

Día 13, día de cumpleaños.
Este fue un viaje poco planificado, pero necesario. Mis amigos de tantos años a quienes poco tiempo he dedicado, se afanaron en hacer posible este divertimento.

Viajé por aire un par de horas, me esperaban en el aeropuerto. No terminaban los abrazos y ya estabamos rumbo a una cena. (fue un día loco, ya que viajé tarde porque tenía hora con una bruja que al final se colapsó del corazón y no pudo tener la sesión de canalización que habíamos pactado)

Fuimos al Cotelé, un lugar fantástico en que se podía elegir la carne que se iba a asar y se podía tener la certeza que sería perfecta. Exquisito, buen vino,buena conversación, un deleite.

Un night club algo sórdido y una larga espera de mis amigos en la madrugada (ellos dicen que me esperaban a mí). En fin, nos fuimos a dormir cerca de las 7 de la madrugada.

Almuerzo delicioso en El Paso, visita a la futura parcela de Peter (su sueño) y caminatas varias. Comenzaba a atardecer asi es que propuse comprar algunas cosas y a cocinar.

Salimos a desayunar en una ciudad desierta, costó encontrar un lugar abierto, pero había. Fue un remate para nuestras profundas disquisiciones nocturnas.

Hacia el atardecer, un avión me llevó de regreso a casa.

viernes, 12 de octubre de 2007

recomenzando....

El primer fin de semana de octubre me fui a escalar el cerro Provincia. Gran experiencia, con mi poca preparación y equipamiento, logré pasar todo un fin de semana en la montaña. Puchas que noté la falta de entrenamiento, pero jamás arrugué. Fui el primero en llegar y el primero en bajar, muerto, desecho, pero digno.

Espero poner unas fotos pronto de esta aventura que me reconcilió con mi faceta montañista.

Fui a tocatas varias de jazz, todas disfrutables y sobretodo llenas de añoranzas de este amor inmenso que siento.

Subidas intensas al cerro San Cristóbal, visita a mis viejos, conversaciones con mi hermano, muchas lecturas y deliciosa música.

Continuará......

domingo, 23 de septiembre de 2007

Domingo descansado

Desayuno rápido, ajustes a la bici y vamos por una meditación en el cerro San Cristóbal.

Estaba llenísimo el cerro, demasiada gente, demasiada. Llegué a la cumbre y me detuve solo a cambiar de ropa y seguí hacia el sector de La Pirámide, adonde hay menos gentío. Rica experiencia, cada vez me gusta más andar en bici.

Una deliciosa ducha caliente y a almorzar al viejo Liguria. Por suerte, poca gente, me deleité con unos ravioles de espinacas y ricota acompañado de un buen merlot reserva de Viña Porta, luego un postre de leche y a caminar. La sesión de piano que hizo el notable músico ciego de los domingos familiares del Liguria, me hizo sentir en calma. Hoy es día de tour de museos.

Camino por el Parque Balmaceda, oliendo árboles y gozando el día veraniego. Llego al museo y hay mucha actividad alrededor, títeres, malabarismo (todo un espectáculo con escenario y todo), muchos vendedores de un 'cuantohay'. La primavera llegó y es muy rico notarlo. Muchas parejas jóvenes, alegría y ganas de vivir.

De todo lo que tiene el museo, me quedo con la exposición Sin Miedo, del notable escultor chileno Félix Maruenda, una retrospectiva con gran cantidad de obras. Me emocioné mucho con la fuerza de las figuras, con el dolor de la tortura y el oprobio que vivió Chile y que Maruenda representa en formas imposibles y emocionantes. Solo de un profundo miedo puede salir la energía para crear tanta representación del dolor, notable e imperdible.

Antes de cerrar este relato, estoy disfrutando un CD excepcional que conseguí anoche en el Thelonious, se trata de The Blues and the Abstract Truth, delicioso.

Voy ahora a disfrutar una película que quiero repetirme, Equilibrium. No se la pierdan!!!!

Sábado de vacaciones

Por fin, un día de vacaciones. Temprano, a una hora indeterminada, mi hermano e Ingrid salieron de mi dpto. Me levanté cerca del mediodía, fui a retirar ropa de la lavandería y me preparé para ir al cerro.

Que delicia, subir con todas mis fuerzas el cerro, me relajó. Grato mote con huesillos y un recorrido extenso por más de tres horas por distintas rutas del cerro. Es la meditación que necesita mi mente y que la naturaleza me regala.

Bajé raudo el cerro y me dediqué a vagar por calles antiguas de Providencia. Hay tantas bellezas en esas pequeñas calles, siempre me sorprendo de lo que veo. Pasé a comprar unas empanadas y me fui a casa.

Lecturas varias, una gran película : Ciudadano X y luego al supermercado. Hace casi un mes que no iba y tuve que hacer una gran lista de ausencias en la despensa.

Salí a disfrutar mi sandwich favorito, una frica palta mayo en la Fuente Alemana y luego al jazz. Compré la última Ñ y mientras la leía en el Thelonious, llegan los músicos que acompañarán a Duplaquet y conforman el cuarteto de esta noche.

Temas antiguos del CD Sueños (uno de los más destacados trabajos del jazz chileno), temas de terceros y la sorpresa, tres nuevos temas que formarán parte de una nueva producción.

Notable Duplaquet, gran recital y buen ron.

sábado, 15 de septiembre de 2007

Preparativos de viaje

En junio pasado, acordamos con mi hermano que como fuera aprovecharíamos el 18 yendo a Buenos Aires. Q rico!!!

Llegó anoche mi hermano con Ingrid, su eterna compañera. Abrí vino (unos Pinot Noir Cono Sur 2005 extraordinarios) y nos dimos a la tarea de conversar. Filosofamos, nos extasiamos con poesía de Baudelaire, establecimos asociaciones con Edgard Allan Poe, revisamos temas de la revista Ñ, del periódico Carajo (algo que no conocía). En fin, nos detuvimos cerca de la 1 de la madrugada, ya que ellos se iban a un carrete y yo solo quería descansar.

Dormí hasta el mediodía cuando regresó mi hermano. Así q nos endieciochamos con unas empanadas que trajo y nos preparamos para un tour urbano. Elegí ir a almorzar a un restorán que hace rato m tincaba, El Altar del Inka en Antonio Bellet. Elegante, preciosamente decorado y bastante bien atendido. Los platos no pudieron ser de mejor gusto, filete de atún a la miel y ají amarillo, acompañado con una deconstrucción de una papa mezclada con coloridas verduras, servido con un decorado espectacular. Mi hermano se tentó con otro filete de atún pero al tamarindo y con unos hermosos camarones ecuatorianos también intervenidos con una hoja verde en su interior y al tempura. Notable, realmente exquisitos y acompañados con un Pinot Noir 2005 de viña Porta (una sorpresa).

Caminamos en busqueda de sitios de música abiertos y llegamos al siempre interesante Kind of Blue en la galería El Patio, en donde encontramos varios CD nuevos, Regina Spektor, Mingus, algo que no conocía de Coltrane y varios más. Sin embargo, considerando que en Baires estarán a mitad de precio, resistimos la tentación y seguimos de largo.

Ya nos vamos a Baires!!!!!

jueves sin sangre y feliz

Estaba planificado un carrete dieciochero laboral para esta tarde de jueves.

Un asado en casa de una colega, con muchas actividades planificadas, pero que en la práctica se redujeron a eventuales peloteos, algo de pinpón y un fallido partido de futbol mixto. El resto solo fue comer y beber, además de conversar largo y tendido de cualquier cosa que no fuese pega. Había un cierto aire de disfrute y me alegra que varios hayan dejado sus máscaras en la pega.

Este jueves estaba marcado por el hecho que iría a ver la obra Sin Sangre. Apresuradamente, sin despedirme de nadie, abandonamos la parcela en el primer vehículo que salió y tenía espacio disponible. Un divertido viaje de vuelta, que me dejo en pleno centro de Santiago. De ahí, fui hacia la Plaza Ñuñoa al Bigas Restobar, a servirme algo para calentar motores y encontrarme con mi compañera. Sitio agradable y a esa hora casi vacío, por lo que la conversación fluyó sin contratiempos.

A 10 minutos de la hora del teatro, caminamos al Teatro de la UC, sitio de la magia. Maravillosa obra, mi compañera extasió y de vez en cuando sus miradas de asombro y deleite, me iluminaron el corazón. Mi linda compañía sabe apreciar lo bueno.

Concluida la placentera cita con el arte, nos fuimos a otro sitio en la Plaza Ñuñoa, a beber unos tragos y a disfrutar su compañía. Que rico es gozar la vida así.

jueves, 13 de septiembre de 2007

Conversaciones profundas

Este miércoles me junté con una amiga que no veía hace mucho tiempo, así es que elegí un lugar de buen pasar, poco ruido para alentar la conversación y de buen rendimiento en el servicio.

La Plaza del Mulato Gil, antiguo pero querido lugar y particularmente en la pérgola (ya que el R. estaba lleno), una buena tabla de quesos, un adecuado vino y el resto pura conversación.

Es un buen lugar para conversar ya que el volumen de la música es adecuado, la temperatura ambiental razonable y sobretodo, tranquilidad. A pesar que la noche se presentaba algo fría, estuvo disfrutable el ambiente, incluido los tragos de repechaje que fueron generosos y ricos.

Una lata que a la medianoche se note cierto nerviosismo por cerrar, pero bien, no todos son tan buhos.

En la entrada una venta de pequeños retablos y libros viejos le dan un ambiente especial al barrio, cada vez me gusta más Lastarria.

Recomendable.

martes, 11 de septiembre de 2007

Amasando la espalda

Una singular invitación para una marcha blanca de un salón de masajes ultratecnologizados, me llevo a las 13 horas del lunes a Descanso Urbano. Gran concepto, un lugar céntrico, limpio, austero, bien dotado y sobretodo bien atendido.

Me tiendo en la camilla sin sospechar como funcionaba el asunto, me tapan con una delgada frazada, conectan el robot y bingo!. Distintas piezas móviles, casi vibrantes, comenzaron a deslizarse ritmicamente por mi espalda y piernas, en forma de olas que iban masajeando, cabeza, cuello, columna, piernas. Salvo por el pasaje en que la máquina destroza mi sacro (eso duele), estuvo magnífico. Al punto que ni sentí los 40 minutos de la travesía masajística.

Deliciosa experiencia.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Tranquilo domingo

Desperté un par de segundos antes que sonara mi despertador (no hay opción, sin despertador, sigo de largo). Las 11 de la madrugada, tiempo de desayunar e ir al cerro San Cristóbal. Alrededor de las 12 ya estaba pedaleando con esfuerzo en el kilómetro 2. Hoy me costó más que otras veces mantenerme sobre 10 Km/h en la subida. Me estoy volviendo viejo.

El mote con huesillos me supo especialmente agradable, una vez que me cambié de ropa (me saqué la polera empapada de transpiración) y pude recuperar el aliento. Algunas elongaciones, una barra de cereales y comencé a bajar. Que delicia, esa vertiginosidad del descenso me hace sentir libre, ingrávido y muy feliz. Casi colisiono con un ciclista despistado que se me cruzó cuando venía bajando al tope de la rapidez. Aunque mi compañera no me cree, he llegado a 54 Km/hr en la bajada, aunque mi marca habitual son 49 Km/hr.

Llegué a casa, una buena ducha, un avance de lecturas pendientes y me preparé para ir a buscar un buen lugar para almorzar. Alrededor de las 15:30 horas llegué a Bellavista a experimentar. Pocos restoranes abiertos y los que estaban abiertos tenían al chef con las zapatillas de clavos puestas. Al final, logré instalarme en el Bangkok, comida thai, delicioso. Un plato de camarones al curry rojo (picante y dulce por la leche de coco), con arroz al jazmín y una deliciosa botella de merlot reserva Santa Ema 2005 (como extraño el 2003). Los fuertes taninos, la madera y el sabor a vainilla (algo fuerte) y frutos rojos, dieron un buen maridaje a mi plato. No había nadie más, por lo que hasta pude fumar en el salón de no fumadores (privilegio interesante en estos días)

Por la ventana, observé largamente a unos tamborileros (en mi definición, un ser humano a un tambor pegado, con cuerdas para activar otras percusiones que le permiten bailar al son de su propia música). Son un encanto para los extranjeros y una fuente entrópica de ruido ambiental.

Me fui a patiperrear nuevamente con dirección al Centro Cultural Estación Mapocho, esperaba ver dos exposiciones. Al final solo pude ver una, Reminiscencias, un trabajo fotográfico nacido del erotismo y el amor de un fotógrafo por su musa. Buen montaje digital a partir de un formato analógico. Sigo pensando que el amor saca lo mejor del ser humano.

La segunda exposición estaba funada porque pasó una columna de manifestantes y tiró piedras al interior. Que lata, esperaba ver las fotos de multiples pajarillos de la Patagonia,

Finalmente, decidí marchar a casa para resumir estas experiencias y descansar.