Desde que dejé de beber café (al menos en las cantidades que acostumbraba), encontré el placer del buen té. Más sutil, con sabores más delicados y variados y sobretodo combinable de manera virtuosa.
Tras una ocupada semana, hoy salí a hacer trámites diversos y el cosmos me acercó inevitablemente al lugar en donde se encuentra este pequeño pero contundente reducto de placeres citadinos. Se trata de Granos y Hojas, un lugar dedicado a las sensaciones que provoca un buen café o un té, además de otras delicias que siempre asombran. Hace casi cinco años que les conozco y fue grata la sorpresa de saber que siguen existiendo y ya tienen una sucursal en el barrio Bellavista.
Tras observar la extensa carta, me incliné por una intrigante combinación, té verde y negro maridados con arándanos, trocitos de manzana y flores de maravilla. Maravilloso y con el mejor nombre de la lista, "Nostalgia Otoñal". Exactamente lo que se avenía con mi estado de ánimo.
Tres exquisitas tazas alcancé a beber mientras leía un buen libro que compré hoy. Un descanso bien merecido tras la semana laboral.
Visiten www.granosyhojas.cl y disfruten su exquisita oferta.
sábado, 26 de abril de 2008
lunes, 21 de abril de 2008
Curso de Montaña : examen y disfrute
Como en cualquier curso, llega el momento en que hay que mostrar que se ha aprendido y que se han cumplido los objetivos.
Mi autoevaluación, previa a esta jornada, ya era positiva pues aprendí muchas cosas y las más importantes fueron regalos especiales. Aprendí a revalorar al ser humano, ese que en contacto con la bella naturaleza es auténticamente feliz, a pesar de la precariedad que puede suponer la vida de campamento o el esfuerzo físico que exige la montaña. Aprendí del compañerismo, la solidaridad, la sana alegría de compartir una noche estrellada o el agua de una misma botella. También aprendí mucho más del trabajo en equipo, en donde cada cual opera según sus capacidades y obtiene según sus verdaderas necesidades. Gran experiencia.
Partimos casi de de madrugada el sábado, los 10 alumnos convocados, con rumbo al sector de El Toyo, en el Cajón del Maipo. El punto de reunión fue la plaza de san José de Maipo. Junto a mi cordada, Francisco y Kosta, aprovechamos de buscar un temprano desayuno y terminamos comiendo empanadas de pino recién horneadas. La montaña me da hambre. Glup!!.
Una vez que arribamos al lugar de destino, comenzó el primer desafío, hacer cruzar las mochilas sobre un río usando una tirolesa. Estuvo interesante y casi risible porque la cuerda que teníamos disponible era dinámica, por lo que por más que la tensamos igual "guateó". En todo caso, tarea cumplida.
Siguiente parada, dejar equipamiento y sentarnos al examen escrito. Un típico examen de la Escuela Nacional de Montaña, que aparentemente nos fue bien a todos. Cierto que si, Rodney?
A medida que terminábamos, las cordadas comenzamos a armar el campamento ante la atenta mirada del instructor (imagino que evaluó cada detalle de lo que hizo cada equipo). A continuación, un breve tiempo para almorzar. En ese contexto, hervimos agua y cada cual se preparó un "tres minutos" (la maravilla de un plato completo que queda listo echándole agua caliente). Por supuesto, que aprovechamos de comer unos ricos sandwiches de lomito con palta que preparamos con pan pita y degustar unas ricas aceitunas. Terminamos disfrutando unos postres de frutas picadas en almibar.
Continuamos con una clase extra, escalamiento en cuerda y práctica de rapel. Fue genial ver aplicados los conocimientos de nudos ya adquiridos para poder elevarse o descender con muy poco esfuerzo y en forma segura, con ayuda de cordines y nudos especiales. Notable!!
Siguiente evaluación, una "gymkana", una prueba contra el tiempo en que la planificación estratégica de cada cordada y las habilidades de sus miembros se pondrían prueba. Cuando llegó nuestro turno, partimos corriendo con la cuerda a cuestas hasta el lugar en que usando un anclaje en un árbol, debíamos descender en rapel una pared del cerro, recuperar la cuerda y doblarla correctamente, luego correr por la ribera del río (en semipenumbra, pues ya atardeció) hasta un punto en que estaban los piolet esperándonos para que subieramos un empinado tramo, previa carga de agua desde el río. Ya arriba, dejamos los piolets y corrimos al lugar en que se encontraba desarmado un anafre de combustible líquido. Armar, ecender y hacer hervir el agua. Concluido ese acto, correr a otro punto para armar una carpa y finalmente desarmarla. Uff, 39 minutos tardamos en hacer todo. Excelente prueba!!!.
Concluida la primera jornada de evaluación, hora de cenar. Como teníamos bastante hambre, juntamos ingredientes diversos y cociné un rissotto muy peculiar, con verduras al que añadí salame italiano, chorizo español, corte de aceitunas negras y finalmente, en el extremo "cerdo", queso mantecoso. Quedó exquisito y no alcanzamos repetición. Amenizamos el aperitivo con unos choritos en aceite vegetal y aceitunas rellenas con anchoas. Cenamos alrededor de una fogata que armamos con restos de ramas secas y a la comida siguió una larga tertulia iluminada por una maravillosa luna llena. Que maravilla, que maravilla.
Domingo las 7:15 salimos de la carpa a buscar agua y preparar desayuno rápido, pues a las 8 seguía el examen. Partimos al cerro, piolet en mano, cordines y otros posibles artefactos que adivinamos podríamos requerir. Rodney eligió un acarreo de material arenisco durísimo para que realizaramos una práctica de ascenso con técnicas de marcha. Al principio, aterrador. era como pisar hielo asi que el temor de rodar cerro abajo tenía sustento. Sin embargo, golpeando con los cantos de las botas, haciendo escalones con la pala del piolet y usando lo aprendido, todos pudimos ascender y luego disfrutar el deslizarnos, en forma segura timoneados con el piolet, cerro abajo. Pero no era la prueba, el instructor solo estaba validando que seríamos capaces de hacer la prueba que seguía. Nos llevó a un acarreo idéntico pero mucho más grande, en donde debimos usar todas las técnicas tanto de marcha como de autodetención. Fue un gran esfuerzo, ya que Rodney se aseguró que las caídas fueran "reales". De hecho, me obligó a repetir mi caída para que fuera muy real. Algunas heridas en el cuerpo quedaron como medallas del trance.
Empolvados hasta los dientes, solo quedaba ir a zambullirse al río. Delicioso, frío pero indispensable. La última prueba, fue una maratón de nudos con cronómetro. Que estresante!!!
Cansados y hambrientos, solo me quedó influir para que desarmaramos rápido el campamento y fueramos a una picada a comer y celebrar. Lo pasamos fantástico, un grupo alegre, buena onda y de valiosas personas.
Gran final para un gran curso.
Mi autoevaluación, previa a esta jornada, ya era positiva pues aprendí muchas cosas y las más importantes fueron regalos especiales. Aprendí a revalorar al ser humano, ese que en contacto con la bella naturaleza es auténticamente feliz, a pesar de la precariedad que puede suponer la vida de campamento o el esfuerzo físico que exige la montaña. Aprendí del compañerismo, la solidaridad, la sana alegría de compartir una noche estrellada o el agua de una misma botella. También aprendí mucho más del trabajo en equipo, en donde cada cual opera según sus capacidades y obtiene según sus verdaderas necesidades. Gran experiencia.
Partimos casi de de madrugada el sábado, los 10 alumnos convocados, con rumbo al sector de El Toyo, en el Cajón del Maipo. El punto de reunión fue la plaza de san José de Maipo. Junto a mi cordada, Francisco y Kosta, aprovechamos de buscar un temprano desayuno y terminamos comiendo empanadas de pino recién horneadas. La montaña me da hambre. Glup!!.
Una vez que arribamos al lugar de destino, comenzó el primer desafío, hacer cruzar las mochilas sobre un río usando una tirolesa. Estuvo interesante y casi risible porque la cuerda que teníamos disponible era dinámica, por lo que por más que la tensamos igual "guateó". En todo caso, tarea cumplida.
Siguiente parada, dejar equipamiento y sentarnos al examen escrito. Un típico examen de la Escuela Nacional de Montaña, que aparentemente nos fue bien a todos. Cierto que si, Rodney?
A medida que terminábamos, las cordadas comenzamos a armar el campamento ante la atenta mirada del instructor (imagino que evaluó cada detalle de lo que hizo cada equipo). A continuación, un breve tiempo para almorzar. En ese contexto, hervimos agua y cada cual se preparó un "tres minutos" (la maravilla de un plato completo que queda listo echándole agua caliente). Por supuesto, que aprovechamos de comer unos ricos sandwiches de lomito con palta que preparamos con pan pita y degustar unas ricas aceitunas. Terminamos disfrutando unos postres de frutas picadas en almibar.
Continuamos con una clase extra, escalamiento en cuerda y práctica de rapel. Fue genial ver aplicados los conocimientos de nudos ya adquiridos para poder elevarse o descender con muy poco esfuerzo y en forma segura, con ayuda de cordines y nudos especiales. Notable!!
Siguiente evaluación, una "gymkana", una prueba contra el tiempo en que la planificación estratégica de cada cordada y las habilidades de sus miembros se pondrían prueba. Cuando llegó nuestro turno, partimos corriendo con la cuerda a cuestas hasta el lugar en que usando un anclaje en un árbol, debíamos descender en rapel una pared del cerro, recuperar la cuerda y doblarla correctamente, luego correr por la ribera del río (en semipenumbra, pues ya atardeció) hasta un punto en que estaban los piolet esperándonos para que subieramos un empinado tramo, previa carga de agua desde el río. Ya arriba, dejamos los piolets y corrimos al lugar en que se encontraba desarmado un anafre de combustible líquido. Armar, ecender y hacer hervir el agua. Concluido ese acto, correr a otro punto para armar una carpa y finalmente desarmarla. Uff, 39 minutos tardamos en hacer todo. Excelente prueba!!!.
Concluida la primera jornada de evaluación, hora de cenar. Como teníamos bastante hambre, juntamos ingredientes diversos y cociné un rissotto muy peculiar, con verduras al que añadí salame italiano, chorizo español, corte de aceitunas negras y finalmente, en el extremo "cerdo", queso mantecoso. Quedó exquisito y no alcanzamos repetición. Amenizamos el aperitivo con unos choritos en aceite vegetal y aceitunas rellenas con anchoas. Cenamos alrededor de una fogata que armamos con restos de ramas secas y a la comida siguió una larga tertulia iluminada por una maravillosa luna llena. Que maravilla, que maravilla.
Domingo las 7:15 salimos de la carpa a buscar agua y preparar desayuno rápido, pues a las 8 seguía el examen. Partimos al cerro, piolet en mano, cordines y otros posibles artefactos que adivinamos podríamos requerir. Rodney eligió un acarreo de material arenisco durísimo para que realizaramos una práctica de ascenso con técnicas de marcha. Al principio, aterrador. era como pisar hielo asi que el temor de rodar cerro abajo tenía sustento. Sin embargo, golpeando con los cantos de las botas, haciendo escalones con la pala del piolet y usando lo aprendido, todos pudimos ascender y luego disfrutar el deslizarnos, en forma segura timoneados con el piolet, cerro abajo. Pero no era la prueba, el instructor solo estaba validando que seríamos capaces de hacer la prueba que seguía. Nos llevó a un acarreo idéntico pero mucho más grande, en donde debimos usar todas las técnicas tanto de marcha como de autodetención. Fue un gran esfuerzo, ya que Rodney se aseguró que las caídas fueran "reales". De hecho, me obligó a repetir mi caída para que fuera muy real. Algunas heridas en el cuerpo quedaron como medallas del trance.
Empolvados hasta los dientes, solo quedaba ir a zambullirse al río. Delicioso, frío pero indispensable. La última prueba, fue una maratón de nudos con cronómetro. Que estresante!!!
Cansados y hambrientos, solo me quedó influir para que desarmaramos rápido el campamento y fueramos a una picada a comer y celebrar. Lo pasamos fantástico, un grupo alegre, buena onda y de valiosas personas.
Gran final para un gran curso.
martes, 15 de abril de 2008
Ana Karenina : belleza trágica
Este ballet basado en la novela homónima de Tolstoi, aborda el drama de una mujer casada y con hijo pequeño a cuestas, que cansada de una vida insípida al lado de su burgués marido, se enamora de un joven aristócrata. Estamos hablando de fines del siglo 19, es decir, de una época de moralismo a ultranza y donde un adulterio claramente es penalizado por la sociedad.
La obra parte descomunal, con la llegada de un tren y de verdad entra una enorme locomotora que se abalanza sobre el público con un sonido ensordecedor puesto a punto por la orquesta y la increíble dirección de José Luis Domínguez. Maestro!!!. Es una introducción notable en todos sus detalles y también el primer cruce de miradas entre Ana y Vronsky, el ocioso aristócrata. Los escenarios grandiosos se suceden con una precisión de relojería y con una iluminación perfecta.
Siguen escenas preciosas de parques, jardines y un gran baile de sociedad en todos los cuales continúa la seducción, hasta que se convierten en amantes. Ana es el único ser auténtico y de corazón honesto en el mundillo en que vive. Tras consumar bellísimamente su amor, Ana le manda un carta con su anillo de bodas de vuelta al marido.
Huyen al campo los amantes, pero Vronsky, demasiado superficial, al poco tiempo prefiere volver a su vida de aristocracia. El regreso es marcado por el repudio de toda la enferma moralidad de la burguesía. El baile del dolor de Ana es increíblemente hermoso y penoso a la vez, todos la han dejado, marido, hijo (retenido a la fuerza por su padre) y su amante, además de todo el entorno social. Finalmente, Ana se lanza al tren en un baile de desesperanza y muerte.
Maravilloso espectáculo de danza y grandiosa representación social de los antivalores de la burguesía de la época. Tolstoi es un verdadero realista.
Yo voto por el amor, aunque a veces terminen en tragedia.
La obra parte descomunal, con la llegada de un tren y de verdad entra una enorme locomotora que se abalanza sobre el público con un sonido ensordecedor puesto a punto por la orquesta y la increíble dirección de José Luis Domínguez. Maestro!!!. Es una introducción notable en todos sus detalles y también el primer cruce de miradas entre Ana y Vronsky, el ocioso aristócrata. Los escenarios grandiosos se suceden con una precisión de relojería y con una iluminación perfecta.
Siguen escenas preciosas de parques, jardines y un gran baile de sociedad en todos los cuales continúa la seducción, hasta que se convierten en amantes. Ana es el único ser auténtico y de corazón honesto en el mundillo en que vive. Tras consumar bellísimamente su amor, Ana le manda un carta con su anillo de bodas de vuelta al marido.
Huyen al campo los amantes, pero Vronsky, demasiado superficial, al poco tiempo prefiere volver a su vida de aristocracia. El regreso es marcado por el repudio de toda la enferma moralidad de la burguesía. El baile del dolor de Ana es increíblemente hermoso y penoso a la vez, todos la han dejado, marido, hijo (retenido a la fuerza por su padre) y su amante, además de todo el entorno social. Finalmente, Ana se lanza al tren en un baile de desesperanza y muerte.
Maravilloso espectáculo de danza y grandiosa representación social de los antivalores de la burguesía de la época. Tolstoi es un verdadero realista.
Yo voto por el amor, aunque a veces terminen en tragedia.
domingo, 13 de abril de 2008
Tour de Museos: sabrosa caminata
Cumplido el plazo habitual, hoy era un buen día para pasear por los museos de Santiasco. La mayoría de las salas debían haber cambiado sus muestras y ya era hora de verlas.
Partí por la sala de Telefonica, una exposición acerca del movimiento cubista, inicios del siglo veinte y con exponentes portentosos como Picasso y Juan Gris. Me sorprendió la secuencia de Rafael Barradas con sus Aventuras del Diablo, notable y es de 1915!!!.
Me trasladé, caminando por el hermoso Parque Forestal, hacia el Museo de Bellas Artes, previa parada para comprar una rica combinación de helados en el Emporio La Rosa, naranja con jenjibre y Frutilla con Pimienta. Mis favoritos!!.
En el MNBA encontré la colección de dibujos españoles del siglo veinte, una suerte de continuidad con lo que acababa de ver en Telefonica, muchos retratos y dibujos en grafito, aparecen el maestro Juan Gris, Joan Miró y Dalí, excepcionales. En el segundo piso, una muestra fotográfica de Carlos Eguiguren Faz, notable. Son fotos de Valparaíso retocadas digitalmente (bendito Photoshop) para crear mundos nuevos e imposibles.
Para terminar de saciar mi hambre artística, me fui al Museo de Artes Visuales (MAVI) para disfrutar la notable exposición de fotografía subjetiva que cubre tres pisos del museo. Fotos que van desde el mundo microscópico hasta las grandes elaboraciones sobre los negativos (en este caso, no existe photoshop, solo la creatividad aplicada a los negativos).
Buen paseo, un filete de visiones.
Partí por la sala de Telefonica, una exposición acerca del movimiento cubista, inicios del siglo veinte y con exponentes portentosos como Picasso y Juan Gris. Me sorprendió la secuencia de Rafael Barradas con sus Aventuras del Diablo, notable y es de 1915!!!.
Me trasladé, caminando por el hermoso Parque Forestal, hacia el Museo de Bellas Artes, previa parada para comprar una rica combinación de helados en el Emporio La Rosa, naranja con jenjibre y Frutilla con Pimienta. Mis favoritos!!.
En el MNBA encontré la colección de dibujos españoles del siglo veinte, una suerte de continuidad con lo que acababa de ver en Telefonica, muchos retratos y dibujos en grafito, aparecen el maestro Juan Gris, Joan Miró y Dalí, excepcionales. En el segundo piso, una muestra fotográfica de Carlos Eguiguren Faz, notable. Son fotos de Valparaíso retocadas digitalmente (bendito Photoshop) para crear mundos nuevos e imposibles.
Para terminar de saciar mi hambre artística, me fui al Museo de Artes Visuales (MAVI) para disfrutar la notable exposición de fotografía subjetiva que cubre tres pisos del museo. Fotos que van desde el mundo microscópico hasta las grandes elaboraciones sobre los negativos (en este caso, no existe photoshop, solo la creatividad aplicada a los negativos).
Buen paseo, un filete de visiones.
Los Cuates : buena comida mexicana
Cada cierto tiempo me dejo caer por este tradicional lugar, mexicano de punta a cabo. No es solo la ambientación, la música, los colores y la iluminación, también es atendido por mexicanos.
Venía con bastante apetito, así que no me hice de rogar y pedí de inmediato un plato de Carne a la Tampiqueña esperando calmar mi león digestivo. Solicité la carta de vinos y gran decepción, pues solo tenían un par de variedades. Que lástima, aunque igual conseguí un Casillero del Diablo Cabernet Sauvignon 2005, nada mal aunque su publicidad sobrestima sus cualidades.
El lomo a la plancha en una cocción 3/4, sabroso, acompañado de frijoles refritos, una enchilada y guacamole. Lo disfrute lentamente mientras un par de cuates tocaba sus rancheras de rigor en vivo. Sin embargo, mi hambre era mayor. Así que tuve que complementar con unas quesadillas, que estaban fantásticas.
Saciado el apetito, solo me quedaba lugar para un buen café hervido, Café de Olla, con canela, naranja y chocolate. Delicioso!!
La comida mexicana nunca defrauda, sabores y aromas increíbles.
Venía con bastante apetito, así que no me hice de rogar y pedí de inmediato un plato de Carne a la Tampiqueña esperando calmar mi león digestivo. Solicité la carta de vinos y gran decepción, pues solo tenían un par de variedades. Que lástima, aunque igual conseguí un Casillero del Diablo Cabernet Sauvignon 2005, nada mal aunque su publicidad sobrestima sus cualidades.
El lomo a la plancha en una cocción 3/4, sabroso, acompañado de frijoles refritos, una enchilada y guacamole. Lo disfrute lentamente mientras un par de cuates tocaba sus rancheras de rigor en vivo. Sin embargo, mi hambre era mayor. Así que tuve que complementar con unas quesadillas, que estaban fantásticas.
Saciado el apetito, solo me quedaba lugar para un buen café hervido, Café de Olla, con canela, naranja y chocolate. Delicioso!!
La comida mexicana nunca defrauda, sabores y aromas increíbles.
sábado, 12 de abril de 2008
Music Within : deliciosa humanidad
Desde hace un par de semanas he estado viendo una colección de películas diversas, pero la mayoría de ellas (ocho) no lograron siquiera entusiasmarme. Lo notable es que exista tanta producción, aunque no superen la barrera de lo mediocre.
Mi tarde de cine de hoy, fue fantástica. Una película de un desconocido Steven Sawalich, que remece el corazón y nos lleva a contactarnos con la inmensa humanidad que vive en cada ser humano. Un chico de oscuro pasado, Richard Pimentel, hijo de una esquizofrénica con 7 abortos espontáneos a su haber (naturaleza sabia?) y que sueña con el amor de su madre y lograr ser superhéroe. Buscando su destino, descubre sus dotes de gran orador y va a la guerra de Vietnam, para volver inválido como muchos (sordo). Vuelve para darse cuenta de una sociedad que los manda a la guerra pero que no le ofrece opciones de reinserción. Son "feos" los inválidos, no poseen las capacidades para sobrevivir.
El contacto con el personaje increíble que hace Michael Sheen (parálisis cerebral, aunque poseedor de una gran inteligencia y magnífico buen humor), comienza a mostrar el camino a Richard, sus capacidades oratorias pueden servir a otros. La buenamoza Melissa George también encontrará su propio camino al lado de Richard, aunque no sea permaneciendo con él.
Una película basada en un hecho real, que nos muestra que a pesar de nuestras carencias afectivas, podemos ser capaces de amar y de apoyar a otros y en ese camino realizar nuestro potencial humanitario y tal vez nuestro destino. El ser humano está hecho para realizar la proeza de su sabia energía interna, sacar sus talentos a la luz y darlo al mundo. En eso se puede ser grande. Vivan los héroes!!!.
Me encantó, recomendable para todos.
Mi tarde de cine de hoy, fue fantástica. Una película de un desconocido Steven Sawalich, que remece el corazón y nos lleva a contactarnos con la inmensa humanidad que vive en cada ser humano. Un chico de oscuro pasado, Richard Pimentel, hijo de una esquizofrénica con 7 abortos espontáneos a su haber (naturaleza sabia?) y que sueña con el amor de su madre y lograr ser superhéroe. Buscando su destino, descubre sus dotes de gran orador y va a la guerra de Vietnam, para volver inválido como muchos (sordo). Vuelve para darse cuenta de una sociedad que los manda a la guerra pero que no le ofrece opciones de reinserción. Son "feos" los inválidos, no poseen las capacidades para sobrevivir.
El contacto con el personaje increíble que hace Michael Sheen (parálisis cerebral, aunque poseedor de una gran inteligencia y magnífico buen humor), comienza a mostrar el camino a Richard, sus capacidades oratorias pueden servir a otros. La buenamoza Melissa George también encontrará su propio camino al lado de Richard, aunque no sea permaneciendo con él.
Una película basada en un hecho real, que nos muestra que a pesar de nuestras carencias afectivas, podemos ser capaces de amar y de apoyar a otros y en ese camino realizar nuestro potencial humanitario y tal vez nuestro destino. El ser humano está hecho para realizar la proeza de su sabia energía interna, sacar sus talentos a la luz y darlo al mundo. En eso se puede ser grande. Vivan los héroes!!!.
Me encantó, recomendable para todos.
jueves, 10 de abril de 2008
Restobar Mal Hábito : buenos y malos hábitos
En mi permanente búsqueda de nuevos sitios disfrutables, me topé con este singular lugar. Ubicado en las afueras de la estación Manuel Montt del Metro, un edificio de tres pisos de especial esbeltez, por no decir que el ancho es mínimo, aunque la altura respetable.
Bien ambientado como lounge, un primer piso con comedor y bar para disfrutar una cena o almuerzo, un segundo piso estupendo pues añade más privacidad a las ventajas del anterior piso, siempre pequeño pero acogedor. Sin embargo, lo que más luce de este lugar es su terraza en el tercer piso.
Cada sector unido por una selección musical delicada, lounge, indie y electropop, que suena por parlantes estratégicamente ubicados. Un volumen adecuado y una continuidad bien lograda.
Demoran mucho en atender, un mal hábito,aunque la belleza de la chica facilita la aceptación del mal servicio. Pido un sandwich gourmet, barros luco de pollo marinado relleno de guacamole, pero la fugazza no existe, por lo que termino pidiendo una Pizza Marina. Una pieza deliciosa de masa bien lograda, con queso parmesano, camarones, calamares en anillos y trozos de palta más buenos condimentos. la espera fue soportable ya que me permitió resolver una personal tarea de diseño.
El trago oportuno y abundante, para atender la ingesta desafiante de la enorme pizza. En fin, pude cenar, trabajar (un poquito) y divertirme con los personajes que llegaron a este nuevo local (people watching).
Examinando la carta, se puede notar buen gusto en la selección. Entradas cautivantes, selecciones para naturistas, platos contundentes para hambrientos, sandwiches gourmet para uno, sandwiches tradicionales para otros, tablas y una enorme oferta de cocktails.
Mal Hábito, puedes convertirte en lo mismo si no mejoras el servicio.
Un local novedoso y con gran futuro, aunque para mi haya estado deficiente el servicio. Finalmente, es solo cuento de rodaje.
Bien ambientado como lounge, un primer piso con comedor y bar para disfrutar una cena o almuerzo, un segundo piso estupendo pues añade más privacidad a las ventajas del anterior piso, siempre pequeño pero acogedor. Sin embargo, lo que más luce de este lugar es su terraza en el tercer piso.
Cada sector unido por una selección musical delicada, lounge, indie y electropop, que suena por parlantes estratégicamente ubicados. Un volumen adecuado y una continuidad bien lograda.
Demoran mucho en atender, un mal hábito,aunque la belleza de la chica facilita la aceptación del mal servicio. Pido un sandwich gourmet, barros luco de pollo marinado relleno de guacamole, pero la fugazza no existe, por lo que termino pidiendo una Pizza Marina. Una pieza deliciosa de masa bien lograda, con queso parmesano, camarones, calamares en anillos y trozos de palta más buenos condimentos. la espera fue soportable ya que me permitió resolver una personal tarea de diseño.
El trago oportuno y abundante, para atender la ingesta desafiante de la enorme pizza. En fin, pude cenar, trabajar (un poquito) y divertirme con los personajes que llegaron a este nuevo local (people watching).
Examinando la carta, se puede notar buen gusto en la selección. Entradas cautivantes, selecciones para naturistas, platos contundentes para hambrientos, sandwiches gourmet para uno, sandwiches tradicionales para otros, tablas y una enorme oferta de cocktails.
Mal Hábito, puedes convertirte en lo mismo si no mejoras el servicio.
Un local novedoso y con gran futuro, aunque para mi haya estado deficiente el servicio. Finalmente, es solo cuento de rodaje.
martes, 8 de abril de 2008
Tres Continentes : Japón, Italia y Perú
La capacidad de crear fusiones y mezclas de culturas culinarias es infinita y comienza a notarse con la aparición de nuevos restoranes. Este restorán posee la carta más tentadora de cocina internacional que haya visto este último año.
Surtido de Sushi, Sashimi y Tempuras, al lado de Ceviches, Tiraditos y Pulpos. No faltan las Causas, Risottos y muchas Pastas, así como las Tradiciones Peruanas, Carnes y Aves por doquier.
Un local bien ambientado, sobrio y con lindas pinturas modernas, buen aire acondicionado y muchos mozos peruanos, todo amenizado con música peruana. Está claro que el fuerte del lugar es la comida peruana (no terminas de saludar y ya te comentan de los pescados disponibles, en fin, ya saben que es buena cocina la peruana).
A la hora de elegir mi cena, pedí ver la carta de vinos y el mozo se anduvo intimidando con la conversación, ya que partió presuroso a buscar a una chica sommelier para que sirviera el vino. Fue gracioso y al mismo tiempo interesante el manejo de recursos del local. La carta de vinos es variada pero poco abundante, así es que elegí un merlot de Casa Rivas (Valle del Maipo), buen reserva, ligeramente alcohólico y amaderado, pero sabroso merlot al fin.
Ravioles rellenos de pasta de Pato con una interesante salsa de tomillo y queso parmesano. Fantástico plato, novedoso y potente en sabores. Me lo devoré.
Para el postre, elegí un pie de maracuyá que estaba para repetición, fresquísimo y sutil. Ah, por cierto, un buen café negro para acompañar mi despedida del local.
Definitivamente, los peruanos la llevan en combinar creativamente la deliciosa cocina criolla peruana con sabores del mundo. La oferta es cada vez más sofisticada y vale la pena probarla.
Tres Continentes, muy recomendable para una cena tranquila
Surtido de Sushi, Sashimi y Tempuras, al lado de Ceviches, Tiraditos y Pulpos. No faltan las Causas, Risottos y muchas Pastas, así como las Tradiciones Peruanas, Carnes y Aves por doquier.
Un local bien ambientado, sobrio y con lindas pinturas modernas, buen aire acondicionado y muchos mozos peruanos, todo amenizado con música peruana. Está claro que el fuerte del lugar es la comida peruana (no terminas de saludar y ya te comentan de los pescados disponibles, en fin, ya saben que es buena cocina la peruana).
A la hora de elegir mi cena, pedí ver la carta de vinos y el mozo se anduvo intimidando con la conversación, ya que partió presuroso a buscar a una chica sommelier para que sirviera el vino. Fue gracioso y al mismo tiempo interesante el manejo de recursos del local. La carta de vinos es variada pero poco abundante, así es que elegí un merlot de Casa Rivas (Valle del Maipo), buen reserva, ligeramente alcohólico y amaderado, pero sabroso merlot al fin.
Ravioles rellenos de pasta de Pato con una interesante salsa de tomillo y queso parmesano. Fantástico plato, novedoso y potente en sabores. Me lo devoré.
Para el postre, elegí un pie de maracuyá que estaba para repetición, fresquísimo y sutil. Ah, por cierto, un buen café negro para acompañar mi despedida del local.
Definitivamente, los peruanos la llevan en combinar creativamente la deliciosa cocina criolla peruana con sabores del mundo. La oferta es cada vez más sofisticada y vale la pena probarla.
Tres Continentes, muy recomendable para una cena tranquila
Pat O'Leary : bajista excepcional
Llegué a ocupar mi mesa reservada en Thelonious al momento en que los músicos ensayaban. Esperaba que estuviera lleno considerando la presencia del talentoso Patrick, pero el síndrome del lunes de Santiasco resta mucha gente de buenas opciones de disfrute musical y esta fue una de esas.
La conformación de la banda de chilenos acompañando a O'Leary auguraba un buen espectáculo. Gonzalo Palma al piano en su habitual estilo tranquilo y preciso, el hiperkinético Alejandro Espinoza en batería y el divertido René Sandoval en el contrabajo. O'Leary traía su sorpresa bajo el brazo, tocaría con un violoncello de Christian Galvez (el mejor bajista de Chile). Que extraño ver tocar un cello como si fuera un contrabajo, es increíble.
Ninguna pauta, unos pocos acordes tarareados o un nombre de tema y ahí vamos, se largaban al unísono con perfección en temas deliciosos del jazz. Bromista, Pat se autopresentó como Patricio cuando hizo la presentación de la banda, en un limpio inglés.
Tocaron por casi una hora y luego a un breve descanso. Varios amigos del músico norteamericano se hicieron presentes y las tallas iban y venían. Parecía que me encontraba en un bar neoyorkino o de San Francisco confundido en una animada fiesta de amigos.
El virtuosismo puso la nota alta, cuando me pidieron mi lápiz prestado y Patrick escribió unas cuantas notas en una pequeña hoja, la que luego cortó en dos pasando una parte al pianista y otra al contrabajista. Un par de minutos después estaban tocando un tema como si siempre lo hubiesen hecho juntos, mientras Pat sacaba sonidos notables al cello. Qué magnífica función!!!
Vibrante jornada de jazz la que se prolongó hasta pasadas las 2 de la mañana.
La conformación de la banda de chilenos acompañando a O'Leary auguraba un buen espectáculo. Gonzalo Palma al piano en su habitual estilo tranquilo y preciso, el hiperkinético Alejandro Espinoza en batería y el divertido René Sandoval en el contrabajo. O'Leary traía su sorpresa bajo el brazo, tocaría con un violoncello de Christian Galvez (el mejor bajista de Chile). Que extraño ver tocar un cello como si fuera un contrabajo, es increíble.
Ninguna pauta, unos pocos acordes tarareados o un nombre de tema y ahí vamos, se largaban al unísono con perfección en temas deliciosos del jazz. Bromista, Pat se autopresentó como Patricio cuando hizo la presentación de la banda, en un limpio inglés.
Tocaron por casi una hora y luego a un breve descanso. Varios amigos del músico norteamericano se hicieron presentes y las tallas iban y venían. Parecía que me encontraba en un bar neoyorkino o de San Francisco confundido en una animada fiesta de amigos.
El virtuosismo puso la nota alta, cuando me pidieron mi lápiz prestado y Patrick escribió unas cuantas notas en una pequeña hoja, la que luego cortó en dos pasando una parte al pianista y otra al contrabajista. Un par de minutos después estaban tocando un tema como si siempre lo hubiesen hecho juntos, mientras Pat sacaba sonidos notables al cello. Qué magnífica función!!!
Vibrante jornada de jazz la que se prolongó hasta pasadas las 2 de la mañana.
domingo, 6 de abril de 2008
Curso de Montaña II : adrenalina por doquier
Un fin de semana de campeonato, tal vez por lo adolorido y cansado que estoy, pero no menos dichoso. La segunda parte del curso de montaña, se manifestó en un viaje al campo de entrenamiento en Las Melosas, Cajón del Maipo. Partimos a las 8 de la madrugada del sábado con rumbo a dicho lugar, solo nos detuvimos en el pueblo de San José de Maipo para desayunar con cierta grosería, unos ricos Barros Jarpa en pan amasado y luego seguir al campamento.
Los contertulios ya formados en cordadas (mi cordada se mantiene con Francisco y Kosta), ya nos habíamos puesto de acuerdo en temas de alojamiento (quien llevaba la carpa) y en la comida (cada comida principal la auspiciaba uno de nosotros). Gran y dichoso acierto!!!.
Partimos el curso con un repaso breve de nudos (glup!!!, tuve que esforzarme para alcanzar a mis aventajados compañeros quienes habían ejercitado en la semana), pero, por fortuna, nos debimos enfocar en aprender tres nuevos nudos, Dinámico, Fuga y Marinero. Interesantes y útiles.
La parte deliciosa de esta parte, el almuerzo, me tocó improvisarla y preparé a mi cordada un rico arroz con amapolas, pimienta, ajo y cortes de pulpo acompañado de puré de atún y rodajas de tomate. Mientras cocinaba los entretuve con unas aceitunas rellenas de anchoas, deliciosas. Seguido de un postre de frutas picadas en almíbar. Muy bueno, por las caras de satisfacción de mis compañeros.
Sin pausa, partimos a practicar seguridad y marcha en montaña. Ascendimos un cerro cercano que el instructor había elegido (que inteligente y mañoso!!!) y subimos hasta un lugar que nos posicionó en un acarreo interesante. Y bueno, partimos de lo simple, detención del "gato", luego autodetención cuando ruedas hacia adelante y luego cuando ruedas hacia atrás. Que cantidad de costalazos!!!. Dos de las féminas (Magaly y Ximena) hicieron pasos de baile en el vacío y de no estar atento el instructor, todavía están rodando cerro abajo. De hecho, cuando hice una voltereta doble caí con una pierna sobre una piedra y todavía tengo hinchado y herido el muslo. Sin embargo, fue muy aleccionador y me dio seguridad saber que a pesar de todo es posible detener la caída con algo de técnica. En estas volteretas rodando por el cerro, perdí una pieza de mis lentes, no me di cuenta hasta el día siguiente. Igual fue genial!!!
Terminado el periplo en el cerro, nos fuimos a practicar cruce de ríos. Harto helado el trance, pero, muy útil saber como enfrentar un buen torrentón de río.
En la noche, Kosta nos dió un festín, un buen trozo de cerdo para la parrilla, mientras preparaba unos camarones al ajillo para acompañar unos fideos canutos y palta. Delicioso!!!. La jornada de cena se extendió bastante pues, Magaly estaba de cumpleaños este domingo. Así apareció de la nada una botella de vino (Nico, la llevas), té de mate e incluso unos cigarrillos que nos hicieron muy disfrutable una noche pletórica de estrellas y buena onda.
Despertados a las 6:50 horas del domingo, porque Francisco identificó un canto de un pájaro con la alarma de mi celular (maldito!), no hubo otra opción que darle el paso a su demostración gourmet. Huevos revueltos con jamón de pavo (aporte de Anabella) y tomate, queso de cabra al orégano con palta y tostadas de pan ( en la parrilla que sobrevivió a nuestra bacanal nocturna). Un desayuno de dioses, para esperar una jornada intensa.
Nos tocó una sesión de tirolesa, para lo cual fuimos a otro sector en donde tendimos cuerdas sobre un pequeño río en un paisaje de rocas. Muy divertida sesión, amenizada por el impasible instructor e inteligente Rodney, nuestro instructor. Terminado el trance de suspendernos por los aires para ir de un lado a otro, nos fuimos a helarnos en una sesión de travesía de ríos. Dos anclajes, para asegurar que cada "víctima" tuviera su naufragio personal y fuera rescatado de las portentosas aguas del Maipo. Ateridos, como corresponde, todos fuimos rescatados y pudimos cerrar esta jornada.
Desarmado el campamento, hicimos un accidentando viaje para conseguir donde comer unas empanadas de almuerzo, lo cual conseguimos tras tres intentos fallidos. Igual, exquisita jornada.
Viva la buena onda de este grupo, no podría ser mejor.
Los contertulios ya formados en cordadas (mi cordada se mantiene con Francisco y Kosta), ya nos habíamos puesto de acuerdo en temas de alojamiento (quien llevaba la carpa) y en la comida (cada comida principal la auspiciaba uno de nosotros). Gran y dichoso acierto!!!.
Partimos el curso con un repaso breve de nudos (glup!!!, tuve que esforzarme para alcanzar a mis aventajados compañeros quienes habían ejercitado en la semana), pero, por fortuna, nos debimos enfocar en aprender tres nuevos nudos, Dinámico, Fuga y Marinero. Interesantes y útiles.
La parte deliciosa de esta parte, el almuerzo, me tocó improvisarla y preparé a mi cordada un rico arroz con amapolas, pimienta, ajo y cortes de pulpo acompañado de puré de atún y rodajas de tomate. Mientras cocinaba los entretuve con unas aceitunas rellenas de anchoas, deliciosas. Seguido de un postre de frutas picadas en almíbar. Muy bueno, por las caras de satisfacción de mis compañeros.
Sin pausa, partimos a practicar seguridad y marcha en montaña. Ascendimos un cerro cercano que el instructor había elegido (que inteligente y mañoso!!!) y subimos hasta un lugar que nos posicionó en un acarreo interesante. Y bueno, partimos de lo simple, detención del "gato", luego autodetención cuando ruedas hacia adelante y luego cuando ruedas hacia atrás. Que cantidad de costalazos!!!. Dos de las féminas (Magaly y Ximena) hicieron pasos de baile en el vacío y de no estar atento el instructor, todavía están rodando cerro abajo. De hecho, cuando hice una voltereta doble caí con una pierna sobre una piedra y todavía tengo hinchado y herido el muslo. Sin embargo, fue muy aleccionador y me dio seguridad saber que a pesar de todo es posible detener la caída con algo de técnica. En estas volteretas rodando por el cerro, perdí una pieza de mis lentes, no me di cuenta hasta el día siguiente. Igual fue genial!!!
Terminado el periplo en el cerro, nos fuimos a practicar cruce de ríos. Harto helado el trance, pero, muy útil saber como enfrentar un buen torrentón de río.
En la noche, Kosta nos dió un festín, un buen trozo de cerdo para la parrilla, mientras preparaba unos camarones al ajillo para acompañar unos fideos canutos y palta. Delicioso!!!. La jornada de cena se extendió bastante pues, Magaly estaba de cumpleaños este domingo. Así apareció de la nada una botella de vino (Nico, la llevas), té de mate e incluso unos cigarrillos que nos hicieron muy disfrutable una noche pletórica de estrellas y buena onda.
Despertados a las 6:50 horas del domingo, porque Francisco identificó un canto de un pájaro con la alarma de mi celular (maldito!), no hubo otra opción que darle el paso a su demostración gourmet. Huevos revueltos con jamón de pavo (aporte de Anabella) y tomate, queso de cabra al orégano con palta y tostadas de pan ( en la parrilla que sobrevivió a nuestra bacanal nocturna). Un desayuno de dioses, para esperar una jornada intensa.
Nos tocó una sesión de tirolesa, para lo cual fuimos a otro sector en donde tendimos cuerdas sobre un pequeño río en un paisaje de rocas. Muy divertida sesión, amenizada por el impasible instructor e inteligente Rodney, nuestro instructor. Terminado el trance de suspendernos por los aires para ir de un lado a otro, nos fuimos a helarnos en una sesión de travesía de ríos. Dos anclajes, para asegurar que cada "víctima" tuviera su naufragio personal y fuera rescatado de las portentosas aguas del Maipo. Ateridos, como corresponde, todos fuimos rescatados y pudimos cerrar esta jornada.
Desarmado el campamento, hicimos un accidentando viaje para conseguir donde comer unas empanadas de almuerzo, lo cual conseguimos tras tres intentos fallidos. Igual, exquisita jornada.
Viva la buena onda de este grupo, no podría ser mejor.
Nano Stern : nueva trova chilena
Si bien mi plan A era ir a disfrutar música electrónica con Underworld, opté por mi plan B porque necesitaba algo más íntimo y quizás, con más contenido. Tras una cansada semana, bien me vendría escuchar buena música.
La cita, pasadas las 22:30 horas, parte con una guitarra furiosa y la voz inconfundible de Nano. Poderosa y clara, da paso a un tema clásico del Inti illimani, Sambalando, el cual deconstruye para permitir una personal versión, poco a poco se incorporan los músicos de la banda, para los toques de piano, percusión y bajo electrónico. Mientras toca un lindo tema, Cementerios, aparece entre el público Julio Zegers, años que no le veía y sorpresiva visita para la tocata de un cantor tan joven como Stern.
Daniel Navarrete en bajo electrónico, Rodrigo Bobadilla en flauta traversa, acordeón, Cuatro y saxo y Cristián Latorre en percusiones, generan la magia de un conjunto con gran ritmo y muy bien afiatado. Seguirán las conocidas canciones Camino Real, y Jaque Mate. Ritmos fuertes, la guitarra a punto de cortar las cuerdas, mucha pasión. Un espectáculo lleno de vida y folklore.
Entre el público, mucha familia y amigos, incluido un amigo escandinavo de Stern, Matías, quien está fascinado por el pan con palta (que buen gusto!!!).
En la segunda parte, aparece Claudia, hermana de Nano, compositora y dueña de una voz exquisita, ejecutan un tema muy personal y hermoso. Siguen con un tema que supuestamente es un plagio que Pat Metheny hizo a un desconocido brasileño y que es demasiado famoso, Last train Home. Sigue una improvisación de violín y acordeón, deliciosa. me sentí en medio de una fiesta familiar de una familia de músicos. El escandinavo Matías, es muy gracioso y talentoso. Luego, una seguidilla de temas de Nano con un ritmo excepcional.
Una sesión de música deliciosa, un reencuentro con la música morena y local.
La cita, pasadas las 22:30 horas, parte con una guitarra furiosa y la voz inconfundible de Nano. Poderosa y clara, da paso a un tema clásico del Inti illimani, Sambalando, el cual deconstruye para permitir una personal versión, poco a poco se incorporan los músicos de la banda, para los toques de piano, percusión y bajo electrónico. Mientras toca un lindo tema, Cementerios, aparece entre el público Julio Zegers, años que no le veía y sorpresiva visita para la tocata de un cantor tan joven como Stern.
Daniel Navarrete en bajo electrónico, Rodrigo Bobadilla en flauta traversa, acordeón, Cuatro y saxo y Cristián Latorre en percusiones, generan la magia de un conjunto con gran ritmo y muy bien afiatado. Seguirán las conocidas canciones Camino Real, y Jaque Mate. Ritmos fuertes, la guitarra a punto de cortar las cuerdas, mucha pasión. Un espectáculo lleno de vida y folklore.
Entre el público, mucha familia y amigos, incluido un amigo escandinavo de Stern, Matías, quien está fascinado por el pan con palta (que buen gusto!!!).
En la segunda parte, aparece Claudia, hermana de Nano, compositora y dueña de una voz exquisita, ejecutan un tema muy personal y hermoso. Siguen con un tema que supuestamente es un plagio que Pat Metheny hizo a un desconocido brasileño y que es demasiado famoso, Last train Home. Sigue una improvisación de violín y acordeón, deliciosa. me sentí en medio de una fiesta familiar de una familia de músicos. El escandinavo Matías, es muy gracioso y talentoso. Luego, una seguidilla de temas de Nano con un ritmo excepcional.
Una sesión de música deliciosa, un reencuentro con la música morena y local.
martes, 1 de abril de 2008
Cata de Té : sorpresivo aprendizaje
Ampliar el repertorio de posibilidades para nuestros sentidos es una forma de disfrutar la vida y ciertamente, la oferta de la Escuela de los Sentidos (www.escueladelossentidos.cl) para esta cata no podía ser más tentadora.
Salvo por el maestrísimo Pascual Ibañez, catador talentoso y director académico de esta escuela, no conocía a nadie. Estoy seguro que si hubiese sido una cata de vinos, más de alguna cara habría reconocido.
Partió a la hora prevista con una referencia a la Dinastía Tang de China, aunque el verdadero origen del uso de las hojas de la Camelia Silensi (el té) se remonta a la India del 2700 AC. La primera sorpresa, es que solamente es té aquel que provenga de este arbusto, es decir, el té de hierbas no es más que una infusión, pero jamás té.
La recolección puede ser mecanizada (té común) pero la mejor es manual y es hecha solo por mujeres (una referencia a la pureza, que bien). Hecha la recolección, se marchita por algunas horas, luego se enrolla y se fermenta manipulando las variable temperatura y humedad. Luego se seca y listo. Contra todo lo que pensaba, el té es resultado de una fermentación, como el vino, un queso o la cerveza.
El té blanco es no fermentado y se hace solo con las yemas de las hojas (en rigor, no alcanza a formarse la hoja), el té verde tampoco es fermentado, pero si se hace con las hojas del arbusto. El té negro, el que más conocemos, es el que pasa por todas las etapas de fermentación y secado.
Es tan delicado el proceso de un buen té, que bien vale su precio. Sin embargo, la mayoría no sabe como servirlo y generalmente lo hace pedazos. Me enteré que el té debe estar fresco (tienen fecha de vencimiento), solo usar envases sellados (las bolsitas no porque el té se contamina con los olores del medioambiente), jamás echarle azúcar, a lo más cortarlo con un par de gotas de leche si es muy fuerte. Sorprendente!!!!
Servir el té es mucho más complicado de lo que creía, solo debe usarse agua fresca, con el primer hervor, enjuagar la tetera (porcelana idealmente) y botar el agua (es para temperar la tetera), echar 1 cucharada por cada bebedor más una, dejar reposar 2 a 3 minutos, revolver agitando la tetera y servir. Plop! que complicado no?
Bueno, vamos a la cata.
El primero fue un té blanco Pai Mu Tan, con un toque metálico nítido, fresco, algo untuoso y cítrico. Exquisito. Siguió un té verde Dilmah con intenso olor a pasto, a algas o al olor de las rocas en el mar, algo turbio y más amarillo que el anterior. Acompañamiento ideal del sushi. Los japoneses se la traen!!
Después, un té verde chino con bergamota y ginseng, de color muy claro y contundentes aromas, como a perfume de mujer, ácido y con cierta aspereza en la boca. Sería rico macerar un pescado con este té. Probamos una galletita de mantequilla e inmediatamente desapareció esa aspereza inicial. Que rico!!
El siguiente fue un té rojo Pu Erth (el té de los emperadores) con un olor a cochayuyo y a tierra, además de un toque muy mineral. Reprobado, no me gustó!!. El té negro con Lychee (un fruto tropical), con aroma a damasco y a tierra, nos obligó a repetición, pues Pascual advirtió que le había faltado tiempo de reposo antes de servir, asi es que al finalizar la secuencia de cata, lo volvimos a probar y ahí aparecieron aromas a gewurstraminer, a un cosecha tardía (late harvest), un té magnífico.
El sexto té fue un negro Bangai Fire con pimienta, canela, jengibre, cardamomo y clavo. Uff, que mezcla, en nariz inunda con cardamomo y canela, pero en boca, increíble aparecen todas las componentes en forma perfecta. Extraordinario, lo mejor de la noche.
El último de la lista un té Lapsang Souchong, ahumado como con humo de pino verde, un olor a sur de chile, chimeneas y tierra. Acompaño bastante bien al salmón ahumado.
En fin, que increíble cantidad de datos y experiencias gustosas en esta cata. El té ya no será lo mismo para mí.
Salvo por el maestrísimo Pascual Ibañez, catador talentoso y director académico de esta escuela, no conocía a nadie. Estoy seguro que si hubiese sido una cata de vinos, más de alguna cara habría reconocido.
Partió a la hora prevista con una referencia a la Dinastía Tang de China, aunque el verdadero origen del uso de las hojas de la Camelia Silensi (el té) se remonta a la India del 2700 AC. La primera sorpresa, es que solamente es té aquel que provenga de este arbusto, es decir, el té de hierbas no es más que una infusión, pero jamás té.
La recolección puede ser mecanizada (té común) pero la mejor es manual y es hecha solo por mujeres (una referencia a la pureza, que bien). Hecha la recolección, se marchita por algunas horas, luego se enrolla y se fermenta manipulando las variable temperatura y humedad. Luego se seca y listo. Contra todo lo que pensaba, el té es resultado de una fermentación, como el vino, un queso o la cerveza.
El té blanco es no fermentado y se hace solo con las yemas de las hojas (en rigor, no alcanza a formarse la hoja), el té verde tampoco es fermentado, pero si se hace con las hojas del arbusto. El té negro, el que más conocemos, es el que pasa por todas las etapas de fermentación y secado.
Es tan delicado el proceso de un buen té, que bien vale su precio. Sin embargo, la mayoría no sabe como servirlo y generalmente lo hace pedazos. Me enteré que el té debe estar fresco (tienen fecha de vencimiento), solo usar envases sellados (las bolsitas no porque el té se contamina con los olores del medioambiente), jamás echarle azúcar, a lo más cortarlo con un par de gotas de leche si es muy fuerte. Sorprendente!!!!
Servir el té es mucho más complicado de lo que creía, solo debe usarse agua fresca, con el primer hervor, enjuagar la tetera (porcelana idealmente) y botar el agua (es para temperar la tetera), echar 1 cucharada por cada bebedor más una, dejar reposar 2 a 3 minutos, revolver agitando la tetera y servir. Plop! que complicado no?
Bueno, vamos a la cata.
El primero fue un té blanco Pai Mu Tan, con un toque metálico nítido, fresco, algo untuoso y cítrico. Exquisito. Siguió un té verde Dilmah con intenso olor a pasto, a algas o al olor de las rocas en el mar, algo turbio y más amarillo que el anterior. Acompañamiento ideal del sushi. Los japoneses se la traen!!
Después, un té verde chino con bergamota y ginseng, de color muy claro y contundentes aromas, como a perfume de mujer, ácido y con cierta aspereza en la boca. Sería rico macerar un pescado con este té. Probamos una galletita de mantequilla e inmediatamente desapareció esa aspereza inicial. Que rico!!
El siguiente fue un té rojo Pu Erth (el té de los emperadores) con un olor a cochayuyo y a tierra, además de un toque muy mineral. Reprobado, no me gustó!!. El té negro con Lychee (un fruto tropical), con aroma a damasco y a tierra, nos obligó a repetición, pues Pascual advirtió que le había faltado tiempo de reposo antes de servir, asi es que al finalizar la secuencia de cata, lo volvimos a probar y ahí aparecieron aromas a gewurstraminer, a un cosecha tardía (late harvest), un té magnífico.
El sexto té fue un negro Bangai Fire con pimienta, canela, jengibre, cardamomo y clavo. Uff, que mezcla, en nariz inunda con cardamomo y canela, pero en boca, increíble aparecen todas las componentes en forma perfecta. Extraordinario, lo mejor de la noche.
El último de la lista un té Lapsang Souchong, ahumado como con humo de pino verde, un olor a sur de chile, chimeneas y tierra. Acompaño bastante bien al salmón ahumado.
En fin, que increíble cantidad de datos y experiencias gustosas en esta cata. El té ya no será lo mismo para mí.
España en el Corazón : Homenaje a Guernica
La galería de arte del edificio de Codelco normalmente regala buenas exposiciones (es completamente gratis) y en esta ocasión una magnífica muestra.
El escultor Palolo Valdés (www.palolo.cl) rememora tridimensionalmente el Guernica de Picasso, esculturas increibles, llenas de textura, de tierra y espanto. Es impresionante el efecto de ver las figuras horrorizadas de la famosa pintura que recuerda ese sangriento bombardeo del año 1937 a una población civil inocente, durante la guerra civil española.
También hay unos bocetos a mano hechos por Picasso cuando estaba creando la obra y llama la atención que varios sean en colores, cuando finalmente solo retrató oscuridad.
El talento de Palolo es digno de aplausos, consigue representar perfectamente la emoción de los cuerpos, el dolor que grita desde cada forma y la impotencia dibujada en cada gesto. Hermoso e imperdible filete.
El escultor Palolo Valdés (www.palolo.cl) rememora tridimensionalmente el Guernica de Picasso, esculturas increibles, llenas de textura, de tierra y espanto. Es impresionante el efecto de ver las figuras horrorizadas de la famosa pintura que recuerda ese sangriento bombardeo del año 1937 a una población civil inocente, durante la guerra civil española.
También hay unos bocetos a mano hechos por Picasso cuando estaba creando la obra y llama la atención que varios sean en colores, cuando finalmente solo retrató oscuridad.
El talento de Palolo es digno de aplausos, consigue representar perfectamente la emoción de los cuerpos, el dolor que grita desde cada forma y la impotencia dibujada en cada gesto. Hermoso e imperdible filete.